The presidential candidate for Mexico's Institutional Revolutionary Party (PRI), Enrique Peña Nieto, waves at supporters during an electoral rally in Toluca, Mexico State, on June 27, 2012. Mexico will hold presidential elections on July 1. According to a poll released on June 26, Peña Nieto is leading the pack by 15 points just days ahead of the election, followed by leftist candidate Andres Manuel Lopez Obrador. AFP PHOTO/RONALDO SCHEMIDT (Ronaldo Schemidt)
Tres meses después del inicio de la campaña, los cuatro candidatos presidenciales realizaron el miércoles los últimos actos proselitistas previos a la jornada electoral del domingo, a la que están convocados cerca de 80 millones de votantes para elegir al sucesor del presidente Felipe Calderón.
También escogerán a los 500 miembros de la Cámara de Diputados a 128 senadores.
Por ley, los candidatos no pueden hacer actos proselitistas tres días antes de la elección.
Encuestas divulgadas ayer –también el último día para dar a conocer sondeos– mostraban que Enrique Peña Nieto, candidato del PRI, se mantiene a la cabeza de la intención de voto, seguido de Andrés Manuel López Obrador, del izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD), y de Josefina Vázquez Mota, del oficialista Partido Acción Nacional (PAN).
“A menos que estuvieran equivocadas todas las encuestas... o que todos (los encuestadores) estuvieran absolutamente vendidos y hubieran puesto ese resultado a sabiendas de que López Obrador estaba arriba, seguramente ganará Peña”, dijo a la AP José Antonio Crespo, analista del Centro de Investigación y Docencia Económicas.
En Toluca, capital de su natal estado de México, Peña Nieto llamó ayer a sus seguidores a no confiarse y acudir a votar.
Mientras, Ricardo Monreal, coordinador de la campaña de López Obrador, expresó en MVS Radio: “La historia nos demuestra que las encuestas han fallado”, y señaló que está convencido que el izquierdista ganará.
Para Crespo, la ventaja de la cual goza el PRI parece explicarse más por los errores y desaciertos de sus rivales del PAN y PRD, que por méritos propios.
“Lo que explica el regreso del PRI no es tanto que se quiera que el PRI regrese, (sino) es el fiasco que representó el PAN y que el PRD se equivocó de candidato”, dijo.
El PAN ha sido blanco del ataque de sus opositores porque durante el gobierno del presidente Calderón no pudo contenerse la violencia del narcotráfico.
El PRD llegó a la campaña con un López Obrador que repitió en la candidatura presidencial de la izquierda al imponerse en una encuesta al alcalde capitalino, Marcelo Ebrard, visto por algunos como un político más conciliador.
López, exjefe del gobierno capitalino, aparece en el segundo lugar, pero en las últimas semanas asumió una actitud que para Crespo fue errónea, al anticipar que podría ser víctima de un fraude.