El exjuez Andrés Hernández Quesada, quien fue acusado de prevaricato tras haber dejado libre con fianza al empresario Ricardo Alem León, en abril del 2009, fue sobreseído en forma definitiva por el Juzgado Penal de San José.
La resolución en la cual se sobreseyó a Hernández es de fecha 29 de julio del 2011, pero trascendió hasta esta semana, según informó la Oficina de Prensa del Poder Judicial.
El sobreseimiento es una resolución que dicta un juez o un tribunal, en la que suspende un proceso por falta de causas que justifiquen la acción de la justicia.
A Hernández, el Ministerio Público le abrió causa penal por el delito de prevaricato (incorrecta aplicación de la ley) después de que en abril del 2009 dejó en libertad a Ricardo Alem con una fianza de ¢100 millones.
En aquel momento, Alem estaba acusado de tráfico internacional de drogas por el hallazgo de 30 kilos de cocaína en una bodega del empresario, en La Uruca, San José. Por este delito se le condenó en diciembre del 2010 a 20 años de prisión junto a dos personas más.
Meses después de haber dejado libre a Ricardo Alem, el juez Hernández reconoció haber recibido un ofrecimiento de ¢15 millones para hacer desaparecer prueba relacionada con el caso Alem, pero el funcionario aseguró que él rechazó la proposición. Entre las evidencias que le pidieron hacer desaparecer estaban algunas intervenciones telefónicas.
La resolución de sobreseimiento fue dictada por el juez Marco Antonio Cordero Coto y confirmada a la oficina de prensa del Poder Judicial esta semana.
Hernández dijo ayer que la acusación del Ministerio Público se basó en hechos que no eran delito.
“Puse en libertad al acusado con una fianza de ¢100 millones y con la obligación de firmar; estaba dentro de mis facultades; fíjese que la fianza era de muchos millones pero aún así Alem logró pagarlos”, adujo Hernández.
El exfuncionario judicial añadió que, con base en el sobreseimiento dictado a su favor, hace pocos días solicitó al Consejo Superior del Poder Judicial que lo reinstale en el cargo.
“También estoy presentando una demanda contenciosa por el daño que se hizo no solo a mí, sino a toda mi familia; es indudable que mi prestigio profesional fue dañado”, manifestó Hernández.