Negociar para concertar soluciones y desactivar la efervescencia social, pero sin variar las metas fundamentales, parece ser la táctica aplicada por el Gobierno esta semana.
Ante una inminente huelga de educadores, el Poder Ejecutivo retiró del congreso el lunes pasado la Ley de Pensiones del Magisterio Nacional, y frente a un paro indefinido en el Instituto de Desarrollo Agrario (IDA) suspendió temporalmente el despido de 250 empleados.
A pesar de eso, la administración Figueres admite que no renuncia a sus objetivos de cerrar 8.000 plazas, fusionar instituciones y asegurar la sostenibilidad de los regímenes de pensiones.
"Absolutamente seguimos adelante. No queremos crear conmoción pero queremos lograr las metas y con un mínimo de perturbaciones", admitió ayer el primer vicepresidente de la República, Rodrigo Oreamuno.
Aunque el Ejecutivo retiró el proyecto de pensiones envió uno nuevo, idéntico pero sin incluir lo referente al régimen del Magisterio, reconoció ayer el ministro de Trabajo, Farid Ayales. Esto permitirá negociar con los maestros sin la presión de una huelga.
La Asociación Nacional de Empleados Públicos (ANEP) y el Consejo Permanente de Trabajadores (CPT) convocaron para el próximo lunes a un paro de labores en las entidades estatales y a una marcha desde el centro de San José hasta la Casa Presidencial, en Zapote.
Luego del acuerdo del lunes pasado, en esas actividades ya no estará el gremio más poderoso del país: los educadores. Y esto repercutirá en el impacto de la protesta, como lo aceptó anoche Rigoberto Cabezas, coordinador del CPT.
Estas organizaciones amenazan, además, con llamar a una huelga general indefinida después del 1°ree; de mayo si el Gobierno persiste en dejar cesantes a 8.000 servidores, según informó Albino Vargas, secretario general de ANEP.
Pero hoy, a las 11:30 a.m., los sindicalistas se reunirán con el ministro de Trabajo, Farid Ayales, quien una vez más intentará lograr una solución intermedia.
"Para reducir el gasto público, no podemos dejar de lado la reducción del gasto de planilla. Lo que estamos discutiendo es cuál es la forma y ofrecemos un menú de opciones, que no provoque problemas sociales", manifestó Ayales al concluir el Consejo de Gobierno.
"Percibo que el Gobierno ahora está a la defensiva para pasar a la ofensiva después. Negocian pero no renuncian a su norte estratégico", sentenció Vargas.