Cuando Truman iba a entregar la presidencia de Estados Unidos a Eisenhower, general victorioso de la II Guerra Mundial, comentaba: Pobre Ike. En el ejército, daba una orden y esa orden se cumplía. Desde la presidencia, dará órdenes y nada ocurrirá. Atención nuevo presidente.
Todos sabemos que no basta con dar órdenes robustas, claras. Que es necesario que en el sistema existan mecanismos que hagan que las órdenes se cumplan. En el ejército ¿por qué se cumplen las órdenes? Si no se cumplen, el subordinado arriesga un arresto o una corte marcial. Y si las cumple adecuadamente, acumula puntos para un ascenso. A esto se le denomina el sistema de incentivos, estímulos automáticos que hacen que los ejecutores se pongan las pilas.
Estamos hablando de la función de control, la cual se ocupa de que se cumpla lo deseable. Esa es una función olvidada. Todo el mundo sabe lo que es planificar y ejecutar, pero muy pocas veces se piensa en controlar. Controlar no es mirar por encima del hombro del colaborador para asegurarse de que ejecute. Controlar es señalar metas y tiempos. Si en un año se quiere lograr algo, debe explicitarse qué se debe haber logrado en el primer mes. Y si no se lo ha logrado, algo tiene que pasarle a alguien.
En la administración pública costarricense, a pesar de la inamovilidad, se logran muchos resultados. Otros proyectos quedan ahí como ejemplo de ineficiencia. A lo mejor podríamos exhibir los éxitos y los retrasos: publicitar el que tiene más impacto y los nombres de las personas responsables. Tal vez por puro respeto a sí mismos, los funcionarios reaccionarían. Los cronogramas y la rendición de cuentas están muy bien, pero es más fuerte el incentivo de evitar salir en la lista de los costosos atrasos del mes, o de salir en la del mejor desempeño. Hay que transformar la publicidad de estos resultados, de información inerte en información que movilice, tema que de seguro interesará a la Comisión de Infraestructura que se piensa crear para dinamizar esa función. O al movimiento "Adopte un diputado". Y que podría generalizarse a otras unidades organizacionales.
acedenog@gmail.com