Ayer, ocho participantes dispusieron de unos pocos minutos para lucirse en “el arte del café”, en una lucha para elegir, por décima vez, al campeón nacional de baristas .
María Auxiliadora Bonilla, de San Marcos, Tarrazú, obtuvo el mayor puntaje, se llevó a su casa $700 (¢350.000) y se coronó en la final de la categoría mayor. Ahora, representará al país en el mundial en Australia, del 23 al 26 de mayo.
La actividad, que promovió la Asociación de Cafés Finos, empezó a mediodía en Plaza Lincoln, Moravia, y finalizó a las 6:30 p. m.
El reto de los aspirantes fue preparar cuatro tazas de café expreso, cuatro de capuchino y otras cuatro bebidas originales a base del grano. Si se tardaban más de 16 minutos quedaban descalificados por el grupo de jueces, situación que les sucedió a dos concursantes.
El segundo lugar fue para el cartaginés Ariel Bravo, de 19 años, y el tercer lugar se lo llevó Melina Fallas, de 26 años y vecina de Santa María, Dota.
Los seis hombres y dos mujeres participantes son ya especialistas en preparar bebidas a base de café; incluso asistieron a varios talleres.
Según Leire Sarriugarte, de la dirección ejecutiva de la Asociación de Cafés Finos, su participación en el campeonato les traerá, sin duda, ofertas de trabajo.
“Este tema ya está de moda. Hace unos años no se valoraba este conocimiento, pero ahora las cafeterías más especializadas sí remuneran al barista como merece”, dijo.
Para promover el oficio, la Asociación ofrece cursos de barismo básicos todos los meses (cada uno cuesta ¢80.000) y, al año, habilita dos cursos de nivel intermedio.