Los resultados a febrero de los depósitos de ahorro y a plazo que las personas mantienen en los bancos, reflejan con claridad el traslado de inversiones de colones a dólares que realizan los clientes de estas instituciones.
Los depósitos en la moneda local muestran una desaceleración o caída, mientras que los de ahorros en la moneda extranjera tienden al alza.
En dichas cifras se comparan los saldos de cada mes respecto al mismo mes del año anterior, y en el caso de los depósitos en dólares se consideran los datos en esa moneda extranjera para excluir el aumento que obedece al incremento en el precio de la divisa.
En lo que respecta a las cuentas corrientes, los dólares se aceleran, pero los colones también, y lo hacen a mayor ritmo.
Marco Garro, asesor económico de la Cámara de Bancos e Instituciones Financieras de Costa Rica, explicó que eso puede obedecer a que los inversionistas, ante la mayor volatilidad del tipo de cambio, adoptan una posición relativamente especulativa: mantienen más liquidez para comprar divisas cuando baja el precio.
Atractivo de dólares. La mayor expectativa de devaluación, tras el incremento que registró el precio de la divisa, hace que el premio por invertir en dólares supere al de colones y estimule a los ahorrantes a hacer el traslado.
Por ejemplo, una persona que invierte en dólares, a un año plazo, en un banco privado, recibe un rendimiento promedio de 2,56%, el cual se eleva a 8,16% si le suma una devaluación esperada para los próximos 12 meses de 5,6%, que es la que arrojó la encuesta del Banco Central de Costa Rica.
Si invierte en colones en ese mismo periodo, el rendimiento promedio es de 6,06%.
“Esos movimientos de personas cambiando sus ahorros de una moneda a otra, o demandando más crédito en una moneda u otra, son reflejo de los rendimientos; es decir, las tasas de interés en moneda local deben aumentar para que las personas decidan quedarse con los colones que necesitan y con los dólares que necesitan”, señaló José Luis Arce, presidente del Consejo Nacional de Supervisión del Sistema Financiero (Conassif).
Garro añadió que el inversionista, además del retorno de los intereses, puede esperar alguna plusvalía por la depreciación del colón respecto al dólar, pero debe tener cuidado pues el tipo de cambio también puede disminuir.
¿Podría originar un descalce? Arce explicó que en los créditos también hay un traslado de dólares a colones, pero a un menor ritmo porque esa transferencia tiene mayores costos que el de las inversiones.
Consultado si esta situación podría generarles un descalce de moneda a los bancos (tener más inversiones en dólares; es decir, pasivos para los bancos, y menos créditos en esa moneda o activos), el presidente del Conassif dijo que eso podría suceder, pero es precisamente donde los precios y las tasas tienen que empezar a jugar.
Gerardo Corrales, gerente del BAC San José, añadió que ese descalce se puede dar sobre todo en colones donde ya hay iliquidez.
Marco Garro tiene una opinión diferente.
“No nos parece que eso vaya a suceder, pues ese proceso sucede gradualmente y la normativa lo que regula es el cambio en la posición diaria”, añadió.
La posición diaria es la diferencia entre activos y pasivos en cada moneda, en las entidades.
El Banco Central elevó el 13 de marzo pasado la tasa de política monetaria (de referencia) y la que ofrece a un día plazo en los depósitos electrónicos que se realizan por medio de Central Directo, y el 15 de marzo aumentó el resto de tasas en este mismo sistema.