Luego de 25 años de crear y fortalecer una marca, la pastelería Chantilly se convirtió ahora al sistema de franquicias. Hubo muchos motivos, pero uno de los principales fue la crisis que golpeó a esta empresa familiar y que la llevó a reconvertirse, explicó ayer Zeanny Alvarado, su gerente corporativa.
“Bajaron las ventas mucho y decidimos dar un cambio, un rejuvenecimiento a la marca como tal. Que no dejara de ser familiar y mantenerla como una marca fuerte y líder del área de pastelerías”, explicó Alvarado.
Durante el último año y medio se han preparado, con la ayuda de la Cámara de Comercio, para pasar a esta nueva etapa. Tienen 16 empresarios listos para utilizar la marca, pero los primeros estarán en La Sabana Desamparados, Cartago (dos) y Tres Ríos.
Una de las franquicias ya está abierta en San Antonio de Desamparados y representa el inicio de una meta para tener en operación las 16 en unos cinco años.
La empresa está formada por cuatro personas: los padres y dos hijos. Ellos se asignaron las tareas de la siguiente forma: uno se encarga de producción, otro de contabilidad, un tercero de la parte de franquicias y corporativa y el cuarto de diseño e innovación.
Juan Carlos Fallas, director de franquicias de Pet Café, dijo que son una opción para veterinarios jóvenes y clínicas que pretenden desarrollar su negocio en un ambiente competitivo.
Detalló que seleccionan ubicación, cartelera de clientes, personal y servicio de manera integrada y de alta calidad.
Periodista en la sección de Economía. Realizó sus estudios de Comunicación en la Universidad de Costa Rica. Escribe sobre temas de producción y de comercio exterior.
En beneficio de la transparencia y para evitar distorsiones del debate público por medios informáticos o aprovechando el anonimato, la sección de comentarios está reservada para nuestros suscriptores para comentar sobre el contenido de los artículos, no sobre los autores. El nombre completo y número de cédula del suscriptor aparecerá automáticamente con el comentario.