La Superintendencia General de Seguros (Sugese) se opuso, por segunda ocasión, a que el Instituto Nacional de Seguros (INS) mantenga la millonaria reserva del seguro obligatorio de Riesgos del Trabajo.
La Superintendencia argumentó en el oficio SGS-R-2106-2018, del pasado 28 de febrero, que la aseguradora pública no logró justificar ni técnica, ni legalmente las razones para mantener la provisión de la póliza cuyo monto asciende a ¢130.000 millones.
La entidad supervisora argumentó que tiene su origen en un acuerdo de la Junta Directiva del INS, de 1999, pero el Instituto no logró justificar la norma legal en la cual se fundamenta.
"Ni material ni legalmente resulta de recibo, que ahora las autoridades del INS reclamen dentro de sus argumentos y sin ningún fundamento técnico, que la Superintendencia no evaluó temas que no fueron incluidos en el momento procesal oportuno (por el Instituto)", señaló la Sugese sobre el origen de la reserva.
Tomás Soley, jerarca de la Superintendencia, confirmó que el recurso presentado por la aseguradora pública fue rechazado y el caso se elevó al Consejo Nacional de Supervisión del Sistema Financiero (Conassif).
"Los elementos que se presentaron para la aprobación de la reserva no fueron suficientes ni técnica ni legalmente. El INS debe determinar qué hará con esa reserva. Este caso aún no está cerrador porque se presentó un recurso ante el Conassif", afirmó Soley.
La aseguradora pública argumenta que si se suprime la provisión generará un aumento en el costo de la tarifa del seguro de alrededor del 5%, que afectará la solidez de la póliza obligatoria, así como a los patronos y trabajadores.
El seguro obligatorio de Riesgos del Trabajo cubre a los empleados en caso de accidentes laborales.
Según el Código de Trabajo, los patronos son quienes pagan el seguro, costo que se establece según la incidencia de siniestros de cada una de las actividades económicas.
Hasta octubre del año pasado, el INS reportó ingresos por ¢125.000 millones por este seguro obligatorio y un costo pagado por accidentes de ¢74.000 millones, según Sugese.
Disputa por póliza
El INS y la Sugese están enfrentados, desde mediados del año pasado, por la conveniencia de mantener la reserva de la póliza obligatoria.
La provisión del seguro de Riesgos del Trabajo se nutre de los excedentes anuales del pago de la prima del seguro, de las ganancias financieras generadas por la inversión de los recursos y del 10% de las ganancias netas del INS.
El INS enfatizó, entre sus argumentos, que el Código de Trabajo establece la obligatoriedad de la entidad de hacer un aporte anual del 10% de sus utilidades al seguro de Riesgos del Trabajo.
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"La resolución de Sugese –órgano que carece de facultad legislativa– pero que desconoce dicha limitación legal y pretende por la vía del acto administrativo que el INS incurra en una ilegalidad, al disponer que la Institución debe trasladar los fondos al capital del INS", enfatizó el Instituto en los documentos de los cuales tiene copia La Nación.
El Instituto recalcó, en sus fundamentos, que los fondos del seguro obligatorio no pueden ser parte del patrimonio de la entidad.
"La fundamentación de la Sugese está completamente errada y es contraria a derecho, provocando por ello la nulidad absoluta del acto", insistió el INS.
Sugese argumentó, en su resolución, que como supervisor del mercado asegurador tiene la potestad para revisar todas las pólizas que se venden en el país.
Sin embargo, negó que haya establecido al INS cómo debe proceder en el manejo de recursos que están bajo su resguardo.
Mientras el Conassif estudia el recurso de apelación de la aseguradora pública la reserva del seguro obligatorio continuará vigente.