EscucharEl déficit fiscal o diferencia negativa entre los gastos e ingresos del Gobierno se ubicó en 0,6% del Producto Interno Bruto (PIB) en enero pasado, según anunció la tarde de este martes 20 de febrero el Ministerio de Hacienda.
En un comunicado, la entidad también explicó que el déficit primario, es decir, sin considerar los intereses de la deuda del país, llegó en enero a 0,4% de la producción costarricense.
Las dos cifras son semejantes a las que se presentaron enero del 2017, continuó el comunicado de Hacienda.
El ministerio encargado de las finanzas del país detalló que la recaudación tributaria creció un 8,8% al cierre de enero del 2018, con respecto al mismo mes del 2017, al pasar de ¢343.836 millones a ¢374.171 millones, respectivamente. El crecimiento de los ingresos tributarios mantuvo una ligera aceleración, si se compara con el experimentado a enero del 2016, cuando alcanzó un 8,4%, resaltó la institución.
Por otro lado, los gastos totales aumentaron un 7,8% al cierre de enero 2018, con respecto al mes de enero del 2017, al pasar de ¢561.555 millones a ¢605.525 millones respectivamente.
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El ingreso por impuesto de ventas se ve afectado por la desaceleración en la actividad económica, a la que además se le debe sumar una disminución de algunos bienes sensibles a nivel de importación, como el caso de los vehículos, dijo Hacienda. Fotografía Marcela Bertozzi (Marcela Bertozzi)
El aumento en el ingreso se debió, según el informe, a la variación que experimentaron los impuestos de renta o ingresos y utilidades (5,4%), los impuestos a la propiedad (69,3%) y los impuestos sobre las ventas o bienes y servicios (6,2%).
El impuesto sobre el salario, jubilaciones y pensiones, así como al impuesto a las utilidades de las personas jurídicas comandaron el avance en el tributo a la renta. En el caso de los impuestos a la propiedad, los que produjeron mayor crecimiento fueron el de vehículos y el de personas jurídicas.
En tanto, el impuesto único a los combustibles y el general sobre las ventas también surtieron el mejor efecto en los denominados impuestos sobre bienes y servicios.
En lo relativo a los gastos, el crecimiento se debió a la variación que experimentaron los gastos corrientes, al aumentar de ¢536.727 millones a ¢599.697 millones (variación de 11,7%) al comparar el primer mes del 2017 con el de este año.
Los rubros que explican, en mayor medida, la variación de estos gastos son el pago de intereses (45,4%), producto del aumento en la deuda y las transferencias corrientes (9,8%), principalmente para el Fondo de Desarrollo Social y Asignaciones Familiares y el Fondo Especial para la Educación Superior (FEES), declaró Hacienda.
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