Londres
El banco italiano BMPS es la entidad que presenta una mayor vulnerabilidad a una degradación económica, estimó la Autoridad Bancaria Europea (ABE) en su examen general sobre la solvencia de 51 instituciones financieras de la Unión Europea, que en general gozan de buena salud.
De todos los bancos evaluados, Banca Monte dei Paschi di Siena (BMPS) es, con diferencia, la entidad que resistiría peor en caso de un escenario económico desfavorable de aquí al 2018. Su índice CET1, la referencia para medir la solvencia de los bancos, bajaría más de 1.400 puntos de base, desplomándose a un nivel negativo de -2,23%. El ratio de capital que mide la salud financiera del banco cayó 14,23% y es el único de todos que está en negativo.
Este marcador relaciona los fondos que tiene el banco para hacer frente de forma inmediata a imprevistos con el nivel de riesgo de su activo.
En tanto, la banca española salió bien evaluada. Los grandes BBVA y Santander perderían 375 y 350 puntos. Mientras que la entidad española peor evaluada fue Banco Popular con una caída de 610 unidades.
Un total de 13 bancos fueron señalados negativamente por la autoridad, que proyecta que en este escenario perderían al menos 500 puntos de base. En la lista, están los alemanes Deutsche Bank y Commerzbank y el británico Royal Bank of Scotland.
Contrariamente a las pruebas de resistencia (o test de estrés) realizados en el 2011 y 2014, el ABE no se pronunció esta vez si los bancos analizados tienen la capacidad de enfrentar una súbita degradación importante de las condiciones económicas.
El AEB se expresó, sin un afán conminatorio, ofreciendo un panorama basado en una serie de indicadores sobre los capitales y los activos de los bancos sobre la solvencia. Estos datos se transmitirán a los bancos centrales.
“Las pruebas de estrés del 2016 hechas por el AEB muestran que los beneficios del fortalecimiento de capital hecho hasta ahora se ven reflejados en la resiliencia del sector bancario a un golpe importante”, dijo Andrea Enria, director de la entidad.
La expectación se situaba en torno al BMPS, el banco más antiguo del mundo fundado en 1472, considerado como el eslabón más débil de las entidades de la península italiana.
Poco antes, el consejo de administración de ese banco anunció que había acordado ceder los créditos dudosos, por un valor de 9.200 millones de euros (10.288 millones de dólares) y que luego ampliará capital por un monto máximo de hasta 5.000 millones de euros.
Algunos analistas consideran que los activos dudosos de este banco pueden desatar una crisis bancaria en Italia y crear inestabilidades en la eurozona.