La intervención del Banco Crédito Agrícola de Cartago (Bancrédito) no afectará la operación de las tiendas libres del Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS), ni el cobro del impuesto de salida.
Así lo informaron, este 2 de enero, los interventores de Bancrédito Marco Hernández y Johanni Portilla, en un hecho relevante al mercado financiero.
A ambos funcionarios los escogió el Consejo Nacional de Supervisión del Sistema Financiero (Conassif), el pasado 22 de diciembre, para determinar la continuidad o no de la institución.
El Consejo les encargó "tomar posesión de todos los bienes de la entidad, para administrarlos como mejor convenga a los intereses públicos".
Por tal razón, los interventores advirtieron este martes que los deudores del Banco deben pagar las cuotas de sus créditos puntualmente.
Hasta noviembre del 2017, Bancrédito contaba con un saldo de ¢151.987 millones de su cartera de crédito.
Además de ¢37.975 millones en cobro judicial, según la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef).
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"Las personas con obligaciones financieras ante Bancrédito (facilidades crediticias y otras) deben atenderlas puntualmente de conformidad con las condiciones contractuales pactadas", detallaron los interventores del banco estatal.
Uno de los problemas de la institución es que, tras el cierre de sus sucursales, la morosidad a más de 90 días se disparó de ¢13.072 millones, en mayo del año pasado, a ¢43.686 millones a noviembre del 2017, muestran los datos de Sugef.
El pasado 25 de mayo, el Consejo de Gobierno acordó la salida de la intermediación financiera de Bancrédito debido a problemas de liquidez en la entidad pública.
Además, achacó que el deterioro de la institución fue "resultado de publicaciones en la prensa que han causado incertidumbre en el mercado financiero sobre la sostenibilidad de la institución".
Aval a transacción
Por otra parte, los interventores respaldaron la custodia y cancelación de parte de los pasivos de Bancrédito por parte del Banco Nacional.
El pasado 19 de diciembre, la institución pública trasladó al Nacional sus deudas con clientes por un monto de ¢6.379 millones y $4,4 millones. Se trata de recursos en cuentas corrientes, cuentas de ahorro, certificados de depósito a plazo y títulos de deuda.
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Bancrédito también transfirió al Banco Nacional el dinero para cancelar dichos pasivos.
Actualmente, el banco solo adeuda ¢128.000 millones al Ministerio de Hacienda de certificados de depósitos a plazo hechos a comienzos del 2017.