El Banco Nacional de Costa Rica (BNCR) estimó ayer una fuerte afectación en su cartera del crédito, debido al fallo que obliga a la entidad a indemnizar a notarios externos de cuyos servicios se prescindió en el 2008.
De cumplirse la sentencia, que todavía no está en firme, implicaría un pago de ¢11.912 millones a 66 profesionales, lo que significa el 30% de la utilidad prevista para este año, según Juan Carlos Corrales, subgerente general del Banco.
“En caso de pagar la indemnización, se reduciría la capacidad de crecimiento en el crédito en ¢119.000 millones”, dijo Corrales.
El Tribunal Contencioso-Administrativo condenó, el 16 de setiembre, al Banco Nacional a pagar a los notarios el ingreso promedio de entre dos y cuatro años de prestación de servicios. Eso, por haber finiquitado los contratos con los profesionales, sin seguir el debido proceso.
El proceso judicial en los Tribunales comenzó en el 2009, tras la presentación de una demanda por parte del grupo de notarios, a quienes se les rescindió el contrato.
Sin embargo, la disputa legal entre los abogados y el Nacional tuvo su origen en el 2006, cuando el Banco cumplió con un pronunciamiento de la Contraloría General de la República de iniciar una licitación para contratar a nuevos profesionales externos.
Hasta ese momento, la entidad nombraba a muchos de los profesionales directamente por decisión de la Junta Directiva, mientras que a otros los designaba mediante un concurso de antecedentes.
El Banco Nacional usa los servicios de notarios externos para realizar procesos de formalización de créditos o trámites de venta, así como compra de propiedades.
Reproche. El subgerente del Banco Nacional criticó ayer la sentencia judicial y la catalogó como desproporcionada y sin fundamento.
“ Lamentablemente, hay que decirlo: son abogados defendiendo una sentencia de abogado”, afirmó.
Marietta Herrera, directora legal del Nacional, argumentó que siempre cumplieron con el debido proceso porque se comunicó a los notarios la decisión y se les dio la opción de apelar.
Agregó que incluso se les permitió participar en las licitaciones y se nombró a 43 de ellos.
“La sentencia es omisa. ¿Cuál es el perjuicio que alegan (los notarios) si siguieron prestando servicios al Banco y recibiendo un pago por cada proceso que realizan a los clientes? ”, expresó Herrera.
Para Marco Antonio Víquez, presidente de la Unión de Abogados y Notarios Externos de Bancos Estatales e Instituciones Afines (Uneban), la argumentación del Banco Nacional, de que cumplió con el debido proceso en el finiquito de los contratos, es falsa.
“La sentencia del Tribunal es la muestra clara de que el Banco no cumplió. El fallo vela porque se respete el campo profesional de los notarios”, afirmó Víquez
Víquez dijo que, desde el inicio del diferendo, advirtieron al Banco Nacional de Costa Rica sobre las repercusiones de la decisión.