Brócoli y repollo son los cultivos más vulnerables ante erupciones del Turrialba

El brócoli y el repollo son los cultivos que podrían verse afectados en mayor grado como consecuencia de la reciente actividad del volcán Turrialba.

Felipe Arguedas, director de Operaciones Regionales del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), explicó que estos dos productos agrícolas podrían recibir y acumular ceniza, lo que provocaría una pérdida.

"La ceniza entra y es difícil sacarla. Existe el riesgo de que vengan metales pesados, pero todavía no se ha analizado la ceniza", comentó.

Otros productos que podrían verse afectados por la época son la papa y la zanahoria, sin embargo, son menos vulnerables porque crecen bajo la tierra.

De acuerdo con la Cámara de Exportadores de Costa Rica, también podrían resultar con afectaciones el chayote, la piña y los follajes.

"Estos factores inciden en los suelos y los cultivos directamente, lo cual los expone a perderse. Ante esta posibilidad, las empresas de la agroindustria también se verían afectadas por la escasez de productos a la hora de procesarlos", explicó Fiorella Bulgarelli, directora ejecutiva de la cámara.

Para cuantificar los daños, el Ministerio hace recorridos hacia el volcán desde tres direcciones: Turrialba, Coronado y alrededores del volcán Irazú, no obstante, la Comisión Nacional de Emergencias no ha permitido la entrada hacia las áreas más cercnas al volcán.

Arguedas añadió que el MAG está preocupado por la salud de los animales. Un conteo de la entidad indica que en un radio de seis kilómetros alrededor del cráter se ubican unas 68 fincas en las que puede caer la ceniza. En conjunto albergan unos 1.600 animales.

De ese grupo, unos 500 animales son de lechería y ya están protegidos en establos y un grupo mayoritario de los propietarios de las fincas ha implementado mecanismos para evitar que los animales estén expuestos a la ceniza.

Según información que maneja el Ministerio, solamente 12 fincas no han seguido recomendaciones para protección de los animales, lo que expone a unos 100 animales, en su mayoría ganado vacuno.

El Servicio Nacional de Salud Animal (Senasa), adscrito al MAG, pedirá a la Comisión Nacional de Emergencias que le informe sobre las familias que salieron de la zona para verificar que no hayan quedado animales domésticos abandonados u olvidados.