“La desinformación es mucha. Hay gente que llega a los servicios preocupada porque abrazaron a una persona negra, o porque estuvieron en un lugar donde había africanos; esto hace que se dé una alarma que no tiene caso”.
Marco Vinicio Boza, médico de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) y especialista en salud pública, describió así los mitos que hacen difícil el manejo del tema del ébola en Costa Rica.
Catalina Ramírez, epidemióloga de la CCSS, opina algo similar.
“Es importante saber que se requiere de un nexo epidemiológico; es decir, que se haya estado en un país donde hay ébola y que, además, se haya estado en contacto directo con los fluidos de personas con síntomas del virus; si no, usted podrá estar enfermo, pero no de ébola”, aclaró.

Para los expertos, estos mitos hacen que, por un lado, un grupo de personas sea discriminado; por otro, personas que sí estuvieron en estos países pueden ocultarlo para no ser víctimas de discriminación.
“Sí hay que estar atentos, pero no podemos creer que toda persona que viene de África tiene ébola; no todo africano es negro, ni todo negro es africano, ni todo el que tiene ébola es negro”, recalcó Boza.
Para Ramírez, es vital el manejo de los datos correctos tanto por los medios de comunicación como por los centros de salud.
“Estar en el mismo cuarto o en el mismo bus no significa que vayás a enfermarte; solo si se tiene contacto directo con los fluidos. Duncan, el paciente de Texas, estuvo con su novia y el hijo de ella y ninguno de los dos se contagió”, aseguró.
“No imaginen que esto será una pandemia; se podrán ver casos, pero el nivel de contagio del virus no es tan fuerte como para que se contagie mucha gente”, añadió.
Los especialistas concluyen que tampoco habrá en Costa Rica una situación como la vista en África.
En los países donde la enfermedad es epidemia, se acostumbra lavar y abrazar muertos. Esto aumenta la posibilidad de contacto con sangre del recién fallecido.
Además, las comunidades desconfían de la medicina y prefieren la brujería o magia. Creen que el ébola es complot de “blancos”, e ir al hospital es garantía de muerte.
Por estas razones, explican los expertos, la enfermedad en Costa Rica debe verse en forma distinta en relación con África.