Seguramente usted lo ha vivido: tuvo un resfrío y, días después, comienza a sentirse mejor, pero le queda una tos que no parece quitarse con nada y hasta le duelen los pulmones y la garganta por tanto toser.
También podría ocurrir que, tras superar todos los malestares, a los días sufre una recaída.
Según especialistas en Medicina Interna y Neumología consultados por La Nación , estas situaciones pueden verse como “normales”, pero si los síntomas se extienden por más de dos o tres semanas, es probable que se deba a lo que conocemos como “un catarro mal cuidado”.
Así, el verdadero problema no es esa tos residual, que tanto molesta, sino que el descuido de un resfrío puede desencadenar males mayores y que ameritan atención urgente, como lo es una neumonía.
Todo depende del estado de salud del paciente, de cuán grande fue su descuido y de la agresividad del virus.
Si bien no hay datos exactos, cada mes, decenas de ticos se hospitalizan por algo que empezó como un simple catarro.
En la mayoría de los casos, se trata de personas con enfermedades respiratorias o males crónicos de fondo, aunque los médicos advierten de que un resfrío puede complicarse en cualquier individuo.
¿Vida normal? “Es cierto que se puede hacer vida normal si el resfrío es leve, pero hay que tomar precauciones para evitar posibles contagios. Por ejemplo, este no es un momento para hacer actividad física intensa; eso, muchas veces, hace que se vuelva atrás”, manifestó el neumólogo Carlos Álvarez.De acuerdo con el especialista, si el catarro es muy fuerte o si la persona tiene antecedentes de asma u otra enfermedad respiratoria, lo mejor es que extreme cuidados.
Según la médica general, Ana Laura Ramírez, todo resfrío, con tratamiento o sin él, dura de cinco a siete días. Esto es así porque los medicamentos antigripales comunes solo sirven para controlar los síntomas y no para eliminar el virus del resfrío.
“Si luego de tres días con algún tipo de antigripal, usted sigue con los mismos síntomas, vaya al médico, pues es posible que se trate más bien de una infección con bacteria que requiera otro tipo de cuidado (posiblemente antibióticos)”, detalló Ramírez.
Los cuidados. “Muchas de las cosas que las abuelitas nos dicen, sí funcionan: tomar mucho líquido, dejar el cuerpo descansar y abrigarse bien. Es recomendable hacer teletrabajo uno o dos días, porque las defensas están débiles y es más fácil sufrir otras infecciones. Si debe presentarse a laborar, extreme las medidas de higiene: lavarse más las manos, taparse la boca al estornudar y procurar más distancia con los compañeros para evitar infectarlos”, mencionó la doctora.
Asimismo, explicó que los cambios bruscos de temperatura son el principal enemigo para las personas resfriadas.
“ Si usted está acostumbrado a hacer ejercicio puede hacerlo en menor intensidad, pero tome en cuenta que esto calienta al cuerpo y que después usted debe esperar y abrigarse en caso de salir al aire libre”, añadió.
¿Y qué hacer con esa tos incómoda? La especialista dice que esta puede prolongarse por dos o tres semanas, sin que eso sea motivo de alarma; más tiempo que eso, es mejor consultar.
“No siempre es bueno tomar antitusivos, porque muchos dan sueño. Es un proceso natural en el que el cuerpo busca sacar todo rastro del virus, no podemos tampoco ir en contra de este mecanismo del cuerpo”, indicó.
La especialista insistió en la importancia de ingerir mucha agua y en la conveniencia de ayudarse, incluso, con remedios caseros comunes.