Además, entre el domingo y el lunes las autoridades sanitarias chinas confirmaron dos nuevos casos de contagios, ambos en la provincia meridional de Zhejiang.
También, 13 pacientes ya han sido dados de alta tras superar la enfermedad, mientras que otros setenta están siendo tratados en varios hospitales de la zona. La Organización Mundial de la Salud (OMS) inició este fin de semana las investigaciones sobre el origen y características de la nueva enfermedad, que no se había detectado en humanos hasta marzo pasado.
Todos los afectados han sido aislados y están son tratados en hospitales designados, mientras las autoridades insisten en que por ahora no hay indicios de contagio entre humanos, solo de aves a personas.
China ha tomado varias medidas para controlar la enfermedad, entre ellas el cierre de mercados de aves en las principales ciudades.