Evitar la caída del cabello es una tarea que los profesionales de salud y del cuidado capilar deben enfrentar según cada caso que se les presente.
El dermatólogo Daniel Argüello explicó que en este tema influyen aspectos como la edad, el género, ser mujer en edad fértil o estar en la posmenopausia.
En la alopecia androgénica, –la causa más común de caída del pelo– los tratamientos que se siguen son tópicos; es decir, se aplican directamente en el cuero cabelludo.
En gente con casos más severos, se puede ofrecer un medicamento oral, pero este es principalmente para hombres y, en algunos casos, para mujeres en edad posmenopáusica, nunca para mujeres en edad fértil, advirtió Argüello.
En caso de que se sospeche que la caída del pelo tiene que ver con un asunto hormonal, el dermatólogo pedirá a la persona realizarse exámenes de sangre para saber cómo está su hormona tiroidea.
Si hay un problemas, el tratamiento se hará de forma interdisciplinaria, combinando los aportes del profesional en la piel y del endocrinólogo.
Los trasplantes capilares también son una posibilidad, pues ofrecen resultados bastante naturales. Sin embargo, según Argüello, pueden ser algo onerosos.
En el caso de la alopecia areata (calvicie en pequeños círculos), lo aconsejable es usar esteroides o soluciones tópicas que se aplican en la región afectada.
Este padecimiento es una enfermedad autoinmune, en que el cuerpo produce defensas contra el folículo piloso (cavidad donde crece el pelo) y lo destruye por un mecanismo inflamatorio.
Existen otras alternativas como la que ofrece la tricóloga Sandra Mata, especialista en cuidado capilar, de la Clínica Shiatsu. La tricobitriogénesis es una técnica que “estimula la irrigación sanguínea en el bulbo piloso (abultamiento en que termina la raíz del pelo) para mejorar su nutrición”. Eliminar la grasa del folículo permite recuperar la capacidad de producir pelo sano.