Londres. EFE El nivel de mercurio en los océanos se triplicó como consecuencia de las actividades humanas de los últimos siglos, según alerta un estudio publicado en la revista científica Nature.
A partir de mediciones en los océanos Atlántico, Pacífico, Ártico y Antártico, los científicos estimaron que la cantidad total de mercurio disuelto en los mares es de 290 millones de moles, con un margen de error de 80 millones.
Los moles son la unidad con que se mide la cantidad de sustancia.
Sus conclusiones apuntan a que la intervención humana en el ciclo natural del mercurio ha llevado a un incremento de 150% en la presencia de ese elemento en la termoclina (capa de agua que marca la frontera del océano profundo) y a un aumento de más del triple en las aguas superficiales.
Según los investigadores, dos tercios de ese mercurio se concentran a menos de 1.000 metros de profundidad.
Los nuevos cálculos sitúan la concentración de mercurio en un punto medio respecto a las estimaciones teóricas publicadas hasta ahora, que estimaban la cantidad de ese elemento en el océano entre 36 millones y 1.313 millones de moles.
El mercurio es un elemento volátil que se dispersa rápidamente por la atmósfera, donde se mantiene durante meses antes de depositarse en los océanos.
“La combustión de carbón, las extracciones de oro, la producción de cemento y la incineración de basura han contribuido a ese aumento”, explicó Carl Lamborg, geoquímico de la Institución Oceanográfica Woods Hole (Estados Unidos), responsable del estudio.