Honolulú, Estados Unidos
El mundo avanza hacia la meta de restaurar, en el 2020, vastas superficies de tierra y bosques degradados.
Malaui y Guatemala se comprometieron a recuperar 4,54 millones de hectáreas de tierras degradadas, informaron participantes del simposio de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN)
Los compromisos son parte del Desafío de Bonn, lanzado en el 2011 para alcanzar en el 2020 la restauración de 150 millones de hectáreas desforestadas y degradadas
"Ya pasamos el mojón de los 100 millones de hectáreas a 113 millones y estamos bien encaminados a lograr el objetivo del Desafío de Bonn", dijo Bianca Jagger, activista de los derechos humanos.
"Quienes crean que esto no es un anuncio importante, deberían pensarlo dos veces. Esta es probablemente una de las mejores iniciativas que existen hoy en el mundo", agregó.
Jagger detalló que las tierras recuperadas protegerán los recursos hídricos, estimularán la agricultura, generarán trabajo y combatirán el cambio climático.
Un total de 36 gobiernos, organizaciones y compañías están comprometidas con el Desafío de Bonn, lanzado por Alemania y la UICN hace cinco años y respaldado por la Cumbre de la ONU para el Clima en 2014.
Su meta final es llegar al 2030 con 350 millones de hectáreas de tierras restauradas.
De alcanzarse esa meta, se obtendrían unos $170.000 millones anuales en beneficios netos por los recursos hídricos, mejorarán los rendimientos de las cosechas y de los productos forestales y se capturarán hasta 1,7 gigatoneladas de dióxido de carbono por año
Entre los países que recientemente se comprometieron con el plan se cuentan Panamá, Costa de Marfil, Guinea y Ghana.