Seúl. Una mujer considerada familiar de dos niños cuyos restos fueron hallados en sendas maletas subastadas en Nueva Zelanda, se encuentra en Corea del Sur, indicó este lunes a la AFP la Policía de Seúl.
La semana pasada la Policía neozelandesa anunció el hallazgo de los restos de los dos niños que se cree tendrían cinco y 10 años de edad al morir. Los cuerpos fueron hallados en un remolque cargado de objetos comprados por una familia en un remate de bienes abandonados.
LEA MÁS: Gaza deja 16 niños fallecidos durante tres días de bombardeos
La Policía de Nueva Zelanda dijo que los cuerpos estuvieron conservados durante varios años, lo cual complica la investigación del crimen. Las autoridades de Seúl indicaron el lunes que una mujer surcoreana, que se cree tendría parentesco con los niños, estaría actualmente en Corea del Sur.
“Confirmamos que ella está en Corea del Sur y que ella es ciudadana de Nueva Zelanda de origen coreano”, informó un funcionario de la Policía Nacional Coreana a AFP.
Ella llegó a Corea del Sur en el 2018 y no hay registro de que haya salido del país ese año.
“La policía de Nueva Zelanda dirige esta investigación y vamos a cooperar con su solicitud”, agregó el funcionario.
La policía revisó durante horas imágenes y videos, pero los momentos clave podrían haber sido borrados debido al tiempo transcurrido entre la muerte de las víctimas y el hallazgo de los cuerpos.
“Estamos dando lo mejor de nosotros para identificar las víctimas (...) Lo que puedo decir es que estamos haciendo muy buenos progresos con la investigación de ADN”, comentó la policía el día del descubrimiento, agregando que estaban trabajando con la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol).
Tanto la unidad de almacenaje como la propiedad donde fueron llevadas las maletas están siendo examinadas detalladamente por equipos forenses. Autoridades de Nueva Zelanda reiteraron la semana pasada que la familia que halló los cuerpos no tiene relación con los homicidios. Ellos reciben apoyo para enfrentar el trauma, según las autoridades neozelandesas.