Aparte de permitirle al León cazar el liderato, el partido entre Alajuelense y Grecia dejó varias imágenes que dieron de qué hablar, pero hay dos en específico que son una muestra de profesionalismo puro y que tienen como protagonistas a Luis Garrido y a Jonathan Moya.
Una corresponde al momento en el que al hondureño se le complicó la salida y tuvo que marcar de forma arriesgada a Lopsang Balmaceda y a Esteban Rodríguez, quienes intentaban robarle el balón.
El catracho se dejó el esférico pese a la presión en el área manuda de Balmaceda y ambos terminaron en el césped híbrido del Morera Soto.
La pelota estaba suelta y cuando Rodríguez iba a patearla con el propósito de anotarle a Mauricio Vargas, el contención hondureño desde el suelo sacó esa bola con la cabeza.
Garrido no pensó en nada más que no fuera defender los intereses de su equipo y actuó así, sin miedo alguno, a pesar de aquella escalofriante lesión que sufrió el 17 de noviembre de 2015 cuando se rompió los seis ligamentos de la rodilla derecha en un amistoso entre México y Honduras.
Le habían dicho que lo más probable era que no pudiera jugar más, pero ahí está el catracho, convertido en un candado de máxima seguridad para la Liga.
Quizás por su puesto no sea tan mediático, porque no es el líder en asistencias como su compatriota Alex López, ni es el que sacude redes con frecuencia, como Jonathan McDonald, Jonathan Moya y Róger Rojas, pero sí es el que siempre está ahí, defendiendo a capa y espada.
En la página electrónica de Alajuelense, Garrido manifestó: “Para mí fue una jugada normal, sí creo que uno tiene que tomar riesgos y yo me toco los que sean necesarios por el equipo. Para algunas personas la acción puede resultar peligrosa, pero uno en el momento lo menos que piensa es en el peligro, es adrenalina”.
La otra escena que llamó la atención en ese juego y que es muy representativa en el buen momento que atraviesan los rojinegros fue la celebración del gol de Moya que a la postre le dio el primer lugar a la Liga.
El espigado atacante que desde que retornó de la gira asiática de la Selección Nacional está en la suplencia, ingresó de cambio en el 61’ y catorce minutos estaba festejando, tras un pase magistral de McDonald.
Fue un buen gol, pero lo que atrapó las miradas fue ese instante de celebración en el que Moya se fundió en un abrazo efusivo con Mac y con Róger Rojas.
De forma espontánea, el anotador estrechó la cabeza de ellos contra su pecho, reflejando mucha unión.
Y eso, a pesar de que en este momento tanto el hombre que marcha como líder del goleo en esta temporada con 10 perforaciones, Ro-Ro y Barlon Sequeira son titulares.
“Al entrenador (Luis Diego Arnáez) le queda lo complicado, escoger quién va a jugar, pero siempre nosotros respetamos como profesionales. Ahora en mi rol de suplente, que lo respeto, trato de comportarme profesionalmente y aprovechando los minutos que el profe me dé, marco un gol y contento”, apuntó Moya.
Dijo que de parte de él nunca habrá una mala cara por esa situación, sino que lo obliga a dar más para seguir aportando en el club.
“Es normal, son decisiones y pensamientos de diferentes entrenadores, osea, ya los otros entrenadores tendrán un pensamiento diferente y yo respeto las decisiones de Luis Diego. Sé que en mi ausencia hubo compañeros que aprovecharon esa oportunidad, sacaron resultados importantes, lo hicieron de buena manera. Es una continuidad que quiere dar el profe y yo la voy a respetar”.
A su criterio, el problema sería que el equipo no tenga alternativas y que quienes juegan no respondan en la cancha.
“Todos estamos luchando por un puesto, es competencia sana y eso va a beneficiar al equipo. Ya en torneos pasados me ha sucedido que cuando estoy de suplente entro, se me da la anotación y ya ahora pasó contra Grecia. En estos partidos que he iniciado de suplente he hecho las cosas bien y Dios me bendice con una anotación que ayuda bastante al equipo. Es muy importante que la Liga se vea en los primeros puestos y estamos en el primer lugar”, reseñó Moya.
Inclusive, el equipo va ganando fuerza porque llega más competencia.
José Luis Cordero está de vuelta y los rojinegros esperan que a partir de la próxima fecha, el Flaco Arnáez pueda incluir dentro de su convocatoria al jamaiquino Maalique Foster, si el estratega lo considera pertinente.
La Liga visitará a Pérez Zeledón el domingo, a las 2 p. m., en el Cuty Monge.