Por Belén Escudero
Ayacucho (Perú), 1 jul (EFE).- Los jóvenes expedicionarios de la Ruta Quetzal BBVA visitaron la región de Ayacucho, en la sierra central del Perú, después de un largo viaje con origen en Nazca, donde pudieron contemplar sus famosas Líneas, "un lienzo" de figuras geométricas que atraviesa el desierto de la pampa Colorada.
Desde un mirador en el desierto de Nazca, los cerca de 350 estudiantes, procedentes de más de 50 países, observaron algunas de las líneas que componen uno de los grupos de geoglifos (figuras geométricas) más famosos del mundo y que están esparcidas por una superficie de unos mil kilómetros de llanuras rocosas.
Sobre este terreno, los nasca trazaron figuras y la silueta de animales a una escala gigantesca que no ha sido hallada en otros lugares. Figuras de arañas, monos, reptiles, picaflores, peces y otros seres, algunas de las cuales rozan los 300 metros de longitud, como el Guanay (280 metros) y el Pelícano (285).
"El extraterreste" es uno de los "dibujos" más enigmáticos de las Líneas de Nazca, que alcanza los treinta metros de ancho.
Pero, lo que se preguntaban los chavales al contemplar este escenario es por qué se diseñaron estas figuras y su significado.
Fue el científico estadounidense Paul Kosok el primero en darse cuenta en 1939 de la existencia de las líneas realizadas sobre la pátina rojiza del desierto bajo un suelo de color claro que permite observarlas claramente a vista de pájaro.
Desde una avioneta ligera, y a primera hora de la mañana, se puede apreciar la impresionante belleza de uno de los misterios y enigmas arqueológicos del mundo enclavado en Nazca, un municipio de unos 14.000 habitantes que viven fundamentalmente de la agricultura y del turismo.
Las Líneas se ven claramente en el aire, unos trazos que fueron posibles por la acción mancomunada de pueblos hermanados por el culto y la fe, sostienen los lugareños.
Las teorías sobre el significado de las figuras son diversas: Maria Reiche, una matemática alemana, consideró que éstas eran un gigantesco calendario astronómico; otros expertos en el tema creen que se trataba de senderos rituales, mientras que recientemente se ha contemplado también la posibilidad de que estos grandes trazos representaban un mapa hidráulico del valle.
Estos fueron algunos de los últimos aprendizajes de los jóvenes que participan en esta aventura y que ya se encuentran en Ayacucho, tras doce horas de recorrido en autocar atravesando la región de Ica, en la costa peruana.
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