La Paz, 15 may (EFE).- Un grupo de arqueólogos estadounidenses de la Universidad de Pensilvania anunció hoy a EFE que ha descubierto la presencia de geoglifos, gigantescos dibujos en la arena, en las cercanías del Parque Natural de Sajama, en el oeste de Bolivia, con un tamaño 16 veces superior a las líneas de Nazca, en Perú.
El hallazgo arqueológico consiste en un conjunto de líneas "de uno a dos metros de ancho" y "de 20 kilómetros" de longitud, en algunos casos, que forman 436 rutas distintas, y que podrían tener relación con la "cosmogonía andina", sostuvo el estudioso Al Harris, uno de los miembros de la expedición, denominada "Tierra Sajama".
Además de Harris, el grupo de la universidad estadounidense lo componen el arqueólogo Alexei Vranic, que trabaja en las ruinas boliviana de Tiwanaku, próximo al lago Titicaca, desde 1995; Clark Erickson, que ha estudiado en la amazonía boliviana de forma intermitente desde 1974; Heather Rubinstein y Chaing-Hing Chuang, de origen taiwanés.
La zona donde se encuentran los geoglifos ocupa 22.000 kilómetros cuadrados, una extensión 16 veces más grande que la de las famosas líneas de Nazca, en la costa de Perú, presuntamente elaboradas por la civilización del mismo nombre que pobló ese territorio desde 200 a.C. hasta 650 d.C.
En el caso boliviano, todavía no se ha realizado el trabajo de campo necesario para poder determinar la antigüedad del fenómeno, manifestó Erickson, quien explicó que ese será el próximo paso del estudio.
Los primeros esfuerzos de los estudiosos de la Universidad de Pensilvania se remontan a enero pasado, cuando comenzaron a analizar la zona, desde el propio centro docente, con imágenes aéreas y de satélite, utilizando instrumentos de alta tecnología.
Entre los equipos empleados destaca un programa informático denominado GIS (Sistema de Información Geográfica por sus siglas en inglés), que permite crear imágenes en tres dimensiones.
Gracias a este material pudieron identificar las líneas y su relación geográfica con los edificios rituales presentes en la zona, como la "chullpas" o tumbas prehispánicas y las constelaciones, como la de las Pléyades, o el lugar por donde sale y se pone el sol, uno de los símbolos de la cosmogonía andina.
El objetivo de los especialistas es que la Organización para la Educación, la Ciencia y la Cultura de las Naciones Unidas (UNESCO) declare ese territorio Patrimonio Cultural de la Humanidad, para lo cual ya han presentado los resultados preliminares de sus labores a las autoridades de Bolivia y a miembros del organismo mundial. EFE
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