24/05/2011 En el museo de Arte de la Sabana la exposicin de esculturas Catalina del Cid Barillas Acrilico sobre Tela canvas /Alonso Tenorio (Alonso Tenorio)
El arte tiene genio de borrador y de pincel: inventa nuevas líneas, pero a veces despinta las que el ser humano ha trazado..., como las fronteras. Esto nos lo recuerda la muestra
Allí, 12 obras abordan el tema de la migración mediante diversas técnicas y formatos. Las creaciones fueron seleccionadas por el jurado internacional de la II Bienal Conjunciones 2011 entre un total de 110 propuestas.
Según Florencia Urbina, directora del MAC, este año, la bienal extendió la convocatoria a artistas de varios países, a diferencia de la edición anterior, en la que solo participaron creadores de Costa Rica y Nicaragua.
“Decidimos que el tema de la migración fuese abordado de manera globalizada. Se recibieron propuestas de artistas guatemaltecos, salvadoreños, mexicanos, tailandeses e italianos, entre otras nacionalidades”, explica la directora.
La Bienal Conjunciones es patrocinada por el MAC y las asociaciones Amigos del Arte (Amarte) y Ticos y Nicas: Somos Hermanos. La muestra se mantendrá abierta hasta el jueves 30 de junio.
Esa obra es un acrílico sobre tela canvas en gran formato, que representa el fenómeno de la migración a partir de un espacio doméstico atestado de imágenes religiosas, aparatos eléctricos, fotografías, zapatos
“
Además de este premio,
La escultura
El conflicto diplomático surgido en los últimos meses entre Costa Rica y Nicaragua también fue motivo en varias obras de
Donald Jiménez también utilizó este tema en su pieza
Los artistas Gioconda Rojas Howell y Juan Carlos Ferarios Chacón partieron de sus vivencias con los inmigrantes para crear sus obras.
En
“El nombre de la obra refiere a una nicaraguense que conozco y que labora como empleada doméstica. Su historia personal se repite en muchas mujeres que dejan el país para mantener su familia. Los colores representan la condición ambivalente de esas personas: vienen al país para mejorar su situación económica, pero deben hacer un gran sacrificio”, detalla Rojas.
Por su parte, en
Alisson es la niña de diez años que escribió la carta, y la mujer representada es su madre, empleada doméstica en Costa Rica. Alisson, la madre y la carta fueron extraídas de la realidad; la familia permitió a la artista que reprodujese el documento, que se convirtió en el eje alrededor del que gira el mensaje de la instalación.
En la carta, Alisson agradece a su madre el esfuerzo que realiza y le narra algunos problemas que afronta su familia (véase el recuadro). “Este es un homenaje a las obreras domésticas que envían todo el sueldo a su familia en Nicaragua. La figura transparente de la madre representa el vacío que se siente cuando no se tiene cerca a un ser querido”, detalla la artista.
Según Vivian Solano, el museo ha recibido cerca de 1.800 niños de escuelas y colegios que han observado esta exposición en visitas guiadas. Al final del recorrido, los estudiantes plasman lo aprendido en carteles, con pinturas y recortes.
En esas creaciones abundan los mensajes que piden que las diferencias entre Costa Rica y Nicaragua sean superadas cuanto antes. “¿Política o humanidad?”, se lee en uno de ellos. En otro, dos niños lloran y sobre sus cabezas se expande una nube que contiene algunas letras: “¿Cuándo acabará este conflicto?”.
“El prejuicio es hijo de la ignorancia”, dijo el humanista William Hazlitt. Si se lo propone, el arte es capaz de alejarnos de ese mal.