La gallina los empolló durante 35 días y ya nacieron los dos nuevos inquilinos del Zoo Ave, en un proceso muy similar al legendario cuento de “El Patito Feo”, pero esta vez inducido y con fines de ayudar a recuperar una especie en peligro de extinción.
La reproducción inició desde hace mes y medio, cuando se le quitaron los huevos a la Pava de Montaña y se le pusieron a una gallina clueca. Esto significa que el ave de granja está en el periodo de incubación para sacar a sus pollos, en este caso eran pavones.
“La gallina asume el papel de madre sustituta pues los enseña a comer.
Cuando sean separados de esta, ambos animales adquirirán sus comportamientos naturales del pavón”, expresó Sergio González, Vocero de Rescate Animal Zoo Ave.
“Lo que sucede es que cuando al Pavón se le quitan los huevos, se estimula a que ponga más. Con esto favorecemos su reproducción y a la preservación de la especie en la naturaleza” añadió González.
El Pavón pone aproximadamente dos huevos por año, entre febrero y abril. Con este cambio se logra que pongan cuatro, es decir se duplica.
Las poblaciones más grandes de esta ave se encuentran en Corcovado Osa, Carara en el Pacífico Central y el Braulio Carillo entre San José, Heredia y Limón.
Zoo Ave espera liberar los pavones a su hábitat en cuestión de cuatro meses.