CCSS condenada a pagar ¢165 millones por vacunación

¿Causa esclerosis múltiple la vacuna contra la gripe? Los neurólogos responden que “no está demostrado”, pero un tribunal sí halló “un nexo causal” que obligó a la CCSS a pagar ¢165 millones a una médica y a un asistente de pacientes.

En el 2006, Marta Segura Abarca, doctora del Ebais de Caballo Blanco , Cartago, y Giovanni Barquero Gutiérrez, asistente de pacientes del Hospital Max Peralta, de esa ciudad, recibieron la vacuna contra la gripe por una directriz de la Caja para su personal de salud.

Luego de recibir la inmunización, ambos desarrollaron males del sistema nervioso.

Segura sufre esclerosis múltiple (afecta músculos y el movimiento) y Barquero, una encefalomielitis diseminada aguda (causa dolores de cabeza y rigidez muscular).

Ellos demandaron a la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) por daño moral y físico ante el Tribunal Contencioso Administrativo, proceso que se inició en el 2008 y culminó el año pasado.

El Tribunal falló a favor de ambos y la Caja impugnó la decisión ante la Sala Primera.

Los magistrados, sin embargo, confirmaron el pronunciamiento y condenaron a la Caja a pagar una indemnización a los demandantes.

Sus jueces constataron “la existencia del nexo causal entre la conducta de la institución y el daño sufrido”. Así quedó consignado en la sentencia 000687-F-S1-2010.

“La relación causa-efecto es indudable: mis clientes no tenían antecedente de una enfermedad neurológica, eran personas sanas, pero comenzaron con síntomas, días después de la vacunación”, dijo su abogado, Jorge Bermúdez.

Caja pagó. La Dirección Jurídica de la entidad informó de que ya canceló el monto por daño moral y físico, que ordenó el fallo.

Segura, madre de una niña y de 46 años, recibió ¢106,5 millones. Barquero, soltero y de 36 años, obtuvo ¢58,21 millones (en ambos casos, el monto incluye intereses).

“Los actores, dado su padecimiento, ya habían sido pensionados por invalidez, por lo que recibían el monto correspondiente a ese tipo de pensión”, dijo el abogado Eder José Ramírez , de la Caja.

Además de la pensión por invalidez, el Tribunal ordenó que ambos sigan recibiendo su salario.

Empero, Giovanni Barquero denunció que sufre problemas para el pago del salario, cada mes.

“Seguimos en conflicto por el salario de cada mes que me lo atrasan, por el aumento de ley que no llega a tiempo, por la anualidad desactualizada”, afirmó Barquero.

Él vive con sus padres, y busca actividades diarias, pero sufre cansancio si se esfuerza demasiado.

“Si camino mucho me duele el lado izquierdo del cuerpo, la pierna, por ejemplo, porque ese lado resultó afectado”, manifestó.

La Nación también contactó a Marta Segura, pero declinó referirse al asunto.

Sin datos científicos. Los neurólogos Alexánder Parajeles y Mauricio Sittenfeld indicaron durante el juicio que no existe una relación probada entre la vacuna contra la gripe y la esclerosis múltiple.

Se intentó hablar con ambos, pero el segundo experto refirió a Parajeles quien, al cierre de edición, se encontraba fuera del país.

No obstante, en declaraciones dadas a este diario, en agosto del 2009 –luego del fallo–,Parajeles insistió en ese criterio.

“No existe evidencia científica de que la vacuna contra la gripe, o cualquier otra inmunización, produzca esclerosis múltiple”, afirmó Parajeles en aquel momento.

Sin embargo, dijo que sí hay relación entre la aplicación de esa vacunas y la aparición de encefalomielitis diseminada aguda, una inflamación del cerebro que afectó a Giovanni Barquero.

“La encefalomielitis que ocurre en relación con la vacunación aparece una sola vez, y la persona se recupera en forma progresiva. Son casos sumamente raros, y no es esclerosis múltiple”, añadió.

En su sentencia, el Tribunal Contencioso aclaró que la Caja no violó ninguna norma al utilizar la inmunización contra la gripe. De hecho, la entidad inmuniza cada año a grupos de riesgo, como los mayores de 65 años.

“De ninguna manera se puede entender que este Tribunal desautoriza la política de vacunación de las personas como un medio de protección contra las enfermedades contagiosas”, reiteró el fallo.