Al ver que una nueva televisora costarricense ofrece programación que mi compañía de cable no me deja ver, sirva el presente como un desinteresado servicio a Cabletica, a fin de ayudarle a decidir cuáles canales puede mandar a volar para hacerle paso a Canal 9.
Y es que sí, yo sí quiero a Canal 9 en mi televisor. Lo quiero porque tengo derecho a él, porque la ley dice que no deberían privarme de sus programas, los cuales ignoro si son buenos o malos pues, precisamente, para juzgarlos primero debo poder verlos.
Las cableras son poderes unilaterales, que hacen y deshacen con sus parrillas de programación sin que el suscriptor tenga mayor poder de decisión. Estamos claros en que contra las arbitrarias salidas y llegadas de canales extranjeros no se puede hacer nada (Food Network, te extrañamos), pero cuando se trata de televisión nacional sí son otros cien pesos. En estos casos, las cableras no pueden ni deben hacer lo que les da la gana.
Hoy, mi suscripción a Cabletica solo me ofrece cinco canales costarricenses en sus frecuencias originales: los tres de Repretel, y dos de Teletica. Otras señales criollas como las de Enlace, Canal 15, Extra TV, Enlace Juvenil y Telefides andan por ahí, en canales de números altos, por donde uno solo circula cuando ya el zapping es vicioso.
No sé cuáles sugerencias podrán hacer los suscriptores de Amnet y otras empresas, pues hablo desde mi posición de cliente de Cabletica. Asumo que en La Sabana deben estar acongojadísimos revisando canal por canal, a ver cuál quitan con tal de hacerle espacio, con urgencia, al nuevo Canal 9.
Mi humilde sugerencia: manden a volar a Xpert-TV, su querido canal 33.
El 33 es el hermano menor y algo andrajoso del Canal 7, su representante en la frecuencia de UHF que, con lógica absoluta, es parte de la oferta de su primo platudo, Cabletica.
Les sugiero que eliminen pronto a Xpert-TV y que su espacio, aunque sea en el 33, sea ocupado por el 9. Y lo pido porque sé que nadie tomará en serio mi sugerencia y porque primero nos quitarían HBO, MTV o ESPN antes de eliminar a uno “de la casa”.
Y es que, precisamente, cualquier argumento que se dé a favor de mantener al 33 dentro del paquete de una cablera también aplica para reclamar el ingreso del 9 y de todas las demás televisoras costarricenses que son marginadas por dichas empresas.
El Estado determinó que VM Latino sea sinónimo de Canal 29; que Enlace Juvenil sea sinónimo de Canal 35 y que Canal 9 sea eso, el 9, hoy usurpado por Discovery Channel. Y privar al público de ver esas señales (gratuitas, además) en sus respectivos canales es un irrespeto, tanto en lo jurídico como en lo moral.
Frecuencias de sobra hay en el cable para hacerle espacio a los nacionales y negarlo es una mentira muy barata.
“Se está haciendo el estudio del caso”, responden las cableras cuando se interroga el por qué algún canal local no está en sus paquetes. Pamplinas, ¿cuál estudio? Para cuentos, mejor uno de chanchitos y conejitos.
Quiero a Canal 9 en Cabletica... y lo quiero sin que Cabletica lo intervenga y censure, tal y como hace las noches de fin de semana, cuando la empresa bloquea la señal de Extra TV 42 para “librar” a sus clientes de toparse con primeros planos de genitales, orgasmos falsos y demás rasgos propios de la pornografía XXX.
Según el Estado, todos tenemos derecho a ver a Canal 9 y a ver el sexo explícito que emite el 42. Es nuestra decisión ejercer ese derecho o no... no de la cablera. 1