Si tuviera que elegir un hotel para descansar, ¿cuál sería su habitación predilecta?
¿Una suite que literalmente es un avión, un hotel con forma de un perro beagle con decoraciones que giran en torno a ese animal, un dormitorio construido en medio de la selva sobre un árbol de Guanacaste, o un cuarto con temáticas de automóviles? ¿O le gustaría sentirse de otro mundo y hospedarse en un 'ovni', o bien, experimentar la vida de las aves en un 'nido de pájaro'?
La audacia de su diseño ha convertido a estos hoteles en sitios icónicos, que pasan ocupados prácticamente todo el año y en los que a veces hay que reservar con mucha anticipación, pues definitivamente atraen el interés de muchos turistas.
Introduzcámonos a ellos.
Los aviones
En nuestro primer ejemplo, no tenemos que desplazarnos hacia otro país, basta con visitar Manuel Antonio, concretamente el hotel Costa Verde, en la provincia de Puntarenas.
Miguel Ángel López, gerente de recepción del hotel, contó que durante sus viajes, Allan Templeton (el propietario) siempre visualizaba en el aeropuerto Juan Santamaría el fuselaje de un avión Boeing 727 del año 1965 y el de un avión Fairchild C-123 (de 1954), que ya no eran usados pues habían superado su vida útil.
"Fue a las oficinas administrativas del aeropuerto a consultar por ambos fuselajes que estaban allí y le indicaron que uno de los aviones le pertenecía a una asociación de la zona... El presidente fue y ofreció comprarlo y se lo vendieron, igualmente el otro avión", recordó López.
Un dato interesante es que el C-123 fue utilizado por los contrarrevolucionarios (conocidos como contras) en Nicaragua para frenar a los sandinistas durante los años 80, quienes ostentaban el poder en ese entonces.
Se decidió incorporar a los aviones dentro de las instalaciones del hotel y hoy el Boeing es una suite denominada 727 Casa Fuselaje, que tiene un área pequeña de cocina, comedor, dos balcones, sala de televisión, un dormitorio principal y otro secundario, y dos baños. Se inauguró en diciembre del 2010.
Toda su parte interior está hecha de madera de teca nacional y los muebles tallados a mano con madera de teca de Java, Indonesia .
Alojarse allí cuesta entre $260 y $750 por día (más el 13% de impuesto de venta), según la temporada. En este momento el precio es de $360, dijo López.
Entre tanto, el restaurante El Avión se construyó alrededor y por encima de las alas del Fairchild C-123. La estructura específica de la aeronave funciona como bar.
El diseño de este segundo avión mantiene su color original, únicamente se lavó, y conserva sus insignias.
Casa árbol en Osa
Si quiere ser niño otra vez y jugar y trepar en medio de la naturaleza, en Costa Rica existe una casa árbol que se renta especialmente a familias con hijos y a parejas que viajan juntas.
La residencia tiene la particularidad de que se erige sobre un árbol de Guanacaste de más de 40 metros.
Se ubica a unos pocos kilómetros del Parque Nacional Corcovado, en la Península de Osa, Puntarenas, y se denomina Lapa's Nest Tree House.
El diseño de la estructura de seis pisos fue concebido por el artista estadounidense, pintor e impulsor de construcciones sostenibles Michael Cranford, junto a su esposa Rebecca, ambos amantes de este tipo de casas.
Cranford recuerda haber pintado un cuadro del "paraíso de las lapas". "Me divertí tanto diseñándolo que dije: '¿Por qué no construirlo?'".
Su esposa escogió un árbol de Guanacaste como el sitio en el que se levantaría la vivienda.
Ambos decidieron que la construcción se haría en total armonía con la naturaleza, de modo que no se cortarían o afectarían árboles vivos y procurarían dentro de lo posible usar la mayor cantidad de recursos sostenibles al levantarse.
"Fue hecha con madera caída, madera de teca, bambú y podría ser la casa más sostenible de cuatro habitaciones en Costa Rica. En ella pueden dormir ocho personas", dijo Cranford, quien agregó que la edificación se realizó entre los años 2007 y 2008.
Desde la casa -que tiene dos baños- se pueden visualizar todo tipo de aves, monos y ardillas.
Dormir dentro de un beagle
Un beagle de madera de nueve metros de altura, junto con uno más pequeño, sirven de hospedaje en el Dog Bark Park Inn, ubicado en Cottonwood, Idaho (Estados Unidos). Al hotel se le conoce también como Sweet Willy.
Es un alojamiento familiar (bed & breakfast) con una sola habitación, con espacio para un máximo de cuatro personas.
Es manejado por un matrimonio de artistas -Dennis y Frances- dedicados a hacer obras talladas de madera y quienes construyeron el hotel.
Al ser una estructura pequeña, hay que reservar con mucha anticipación.
En el hotel se pueden adquirir souvenirs tallados de beagles y de otras razas de perros.
Ovni, cubo y nido de pájaro
El Treehotel en Suecia cuenta con varias habitaciones con diseños novedosos, todas en medio de los árboles.
Dentro de ellos destaca un ovni (The UFO), construido para alojar a cinco personas: dos adultos y tres niños.
Otra habitación muy popular es el Mirrorcube, un cubo de espejos que refleja la naturaleza a su alrededor, por lo que parece invisible, aunque fue diseñado de una manera que sí es perceptible para los pájaros y así evitar que se golpeen.
Otro cuarto se asemeja a un nido de pájaro, pues por fuera está totalmente cubierto de ramas. Sin embargo, por dentro es un espacio de 17 metros cuadrados para nada rudimentario: posee un diseño moderno, en el que se utilizó madera en las paredes.
Descansar en tuberías de desagüe
¿Se animaría a dormir dentro de estructuras de cemento, que en realidad son tuberías de desagüe recicladas?
Estas habitaciones -ubicadas dentro de un parque cubierto de árboles- las ofrece el hotel Das Park, allá en Ottensheim, Austria, y también hay otro en Alemania.
Si bien el espacio es reducido, cuenta con una cama, luz, y un diseño no tan frío, pues una parte de la pared está pintada con figuras de colores, sumado a que hay pequeñas ventanas circulares.
Cuartos motorizados
¿Es un fanático de los automóviles?
Si su respuesta es afirmativa, el V8 Hotel es para usted, para lo cual tendría que viajar hasta Böblingen, Alemania.
Prácticamente todas las habitaciones le rinden homenaje a diversos tipos de vehículos y cada una de ellas tiene una temática distinta: una se asemeja a un taller de lavado de autos; otra a una estación de gas; una evoca a un autocine; e incluso hay una suite en honor a un vehículo Mercedes Benz.
Allí, los muebles, paredes y cuadros sin duda lo harán sentirse dentro de un vehículo.