En la 40ª reunión del Comité de Patrimonio Mundial de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) se evaluaron los avances que ha realizado Costa Rica en la conservación de los “Asentamientos precolombinos cacicales con esferas de piedra del Diquís”.
Este conjunto –integrado por cuatro sitios arqueológicos ubicados en Osa, Puntarenas– son el único bien cultural costarricense inscrito en la Lista de Patrimonio Mundial.
Los sitios Finca 6, Batambal, El Silencio y Grijalba, fueron inscritos en junio del 2014.
Como parte de los procedimientos que establece la Unesco, Costa Rica debía presentar un primer informe en diciembre del 2015.
El Museo Nacional , institución encargada de dar seguimiento a la declaratoria, envió dicho reporte en noviembre del 2015, según dijo el arqueólogo Francisco Corrales.
Corrales forma parte de la delegación costarricense que participa en la 40ª reunión del Comité, que se celebra del 10 al 20 de julio en Estambul, Turquía.
Reconocimiento. En el documento emitido por Unesco, la organización aplaude las acciones emprendidas por Costa Rica.
“La reacción fue muy positiva. Primero porque el informe se entregó antes de la fecha límite y segundo porque se presentaron avances en todas las recomendaciones brindadas”, declaró Corrales. Sin embargo, los expertos llamaron a atención sobre varios puntos. Uno de los aspectos que preocupa a Unesco es el proyecto de construcción de un aeropuerto en Osa y el proyecto hidroeléctrico El Diquís. Corrales aclaró que existe un equipo interinstitucional que está elaborando la Evaluación de Impacto Patrimonial que propone Unesco.
“ Estamos coordinando con el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) el tema del proyecto hidroeléctrico. Con Aviación Civil se han mantenido reuniones de coordinación para iniciar el estudio del aeropuerto en los próximos meses”, detalló.
El arqueólogo informó, además, que en marzo pasado, el Museo Nacional adquirió la finca en la que se ubica la esfera de El Silencio, la más grande hasta ahora registrada: mide 2,57 metros de diámetro. “Para los próximos meses está pendiente la adquisición de la segunda finca que corresponde a la zona de acceso”, dijo Corrales.
Otro de los puntos en los que insiste la Unesco es en involucrar a las comunidades aledañas a los sitios declarados y procurar su desarrollo económico y social.
“Hay varias actividades de coordinación con grupos locales en términos de educación y emprendedurismo. En los últimos dos años, la visitación a Finca 6 se ha incrementado y esto significa diversos beneficios a las comunidades locales. El Festival de las Esferas, además de la oferta cultural y educativa, también es un evento que permite a artesanos y personas de la comunidad obtener beneficios económicos” .