Estos premios reconocen las mejores investigaciones nacionales en los campos de la Ciencia y Tecnología y que en su mayoría tienen un impacto que trasciende fronteras.
El galardón del 2010 de Ciencia fue para el micriobiólogo Adrián Pinto, quien investiga cómo las hormigas zompopas obtienen su alimento. Por su parte, el premio de Tecnología fue para el ingieniero eléctrico Juan Scott Chaves, quién encontró propiedades antibióticas en los nanotubos de carbono (estructuras pequeñísimas, decenas de veces más delgadas que un cabello).
Los primeros galardones de Ciencia y de Tecnología se entregaron en 1976.