En nombre de The Elders (Los Ancianos), la organización de exlíderes mundiales fundada por Nelson Mandela, llamaron a la cumbre Río+20 "a buscar resultados concretos, considerando que los 3.500 millones de jóvenes (del planeta) deben ser prioridad en sus consideraciones", según una nota de la ONG fundada en el 2007.
Los tres criticaron las negociaciones para lograr un acuerdo que salve al planeta -que este lunes entraron en una controvertida recta final- y coincidieron en que la clave debe estar en "implementar" los compromisos de la Cumbre de la Tierra celebrada en Río de Janeiro en 1992.
"A pesar del escepticismo general, creemos que aún hay tiempo para hacer que Río+20 cuente para las futuras generaciones. No podemos permitirnos otros 20 años para poner a nuestro planeta en un camino sostenible", indicó Brundtland.
Para Robinson, el actual borrador de acuerdo a Rio+20 "aún es debil", pues "los delegados no parecen entender que el foco está en el crecimiento y la inclusión social".
Brasil, que comanda las negociaciones, se propuso sellar un acuerdo el lunes, antes de que comiencen a llegar el martes una centena de jefes de Estado y de gobierno, pero las delegaciones indicaban que las maratónicas reuniones se extenderían en la noche.