San José (Redacción).
Científicos del Massachusetts Institute of Technology (MIT) lograron bloquear los comportamientos compulsivos en ratones.
Esto, afirman en el sitio del MIT, podría ayudar a desarrollar nuevos tratamientos para tratar desórdenes obsesivos-compusivos (OCD) y el síndrome de Tourette.
Para controlar el circuito cerebral responsable de los comportamientos compulsivos, los científicos utilizaron una técnica que actualmente no se utiliza con personas y que consiste en utilizar luz para estimular células corticales sensibles a ese estímulo.
“No hay que estimularlo todo el tiempo; puede hacerse de una manera muy matizada”, dice Ann Graybiel, una de los investigadores que, en estudios previos, se ha enfocado en cómo romper ciertos hábitos.
Scott Rauch, presidente y psiquiatra en jefe del Hospital McLean en Belmont, Massachusetts, dice que el estudio del MIT "abre la puerta a un universo de nuevas posibilidades para intervenciones futuras".