La dieta de un padre puede influir en la salud de su descendencia, reveló un estudio publicado en la revista Nature.
De acuerdo con los investigadores, es importante que los futuros padres ---y no solo las madres--- consuman vitamina B9 (folato), que es de donde se sintetiza el ácido fólico.
Esta se encuentra en una variedad de verduras de hoja verde, cereales, frutas y carnes.
En el estudio, realizado con ratones, los investigadores encontraron que la deficiencia de folato paterna se asociaba con más defectos de nacimiento en los hijos, en comparación con las crías de ratones cuyos padres fueron alimentados con una dieta con suficiente folato.
"Nos quedamos muy sorprendidos al ver que había un aumento de casi 30% en los defectos que incluían anormalidades y deformidades esqueléticas muy severas a nivel de cráneo y columna", dijo Romain Lambrot, otro de los investigadores.
En su opinión, las personas que viven en partes del mundo donde hay inseguridad alimentaria “pueden estar particularmente en riesgo de deficiencia de folato”.
"A pesar del hecho de que el ácido fólico se añade a una variedad de alimentos, los padres que están comiendo alto contenido de grasa, dietas basadas en comida rápida o que son obesos pueden no ser capaces de utilizar o metabolizar ácido fólico para alcanzar los niveles adecuados de esa vitamina”, explicó Sarah Kimmins, investigadora de la Universidad McGill, en el sitio web de ese centro de estudios.