Costa Rica no cuenta con estudios epidemiológicos que le indiquen cuántos pacientes con enfermedades mentales hay.
Esto dificulta una mejor atención para esta población.
Sin embargo, la fundación Fundamentes procura cambiar la situación y por ello busca financiamiento para realizar el primer estudio epidemiológico de salud mental, con el apoyo del Ministerio de Salud y de la Universidad de Costa Rica (UCR).
El proyecto se presentó para un estudio de financiamiento ante la Junta de Protección Social (JPS). Estudiar la salud mental de todo el país podría costar poco menos de $1 millón (¢500 millones).
“No tener un estudio es un problema serio. Sin estudios es muy difícil saber cómo tomar decisiones en materia de salud pública o dar tratamiento a tiempo y seguimiento a todos los pacientes”, comentó la psiquiatra Sissi Castillo, viceministra de Salud.
“Estos trastornos no solo tienen un componente genético, también hay un componente social y cultural que debemos aprender a manejar. Si no sabemos cómo se distribuyen estas enfermedades, no podremos saber cómo trabajar”, añadió.
En tanto esperan una respuesta favorable, el Ministerio, Fundamentes y la UCR trabajan en la adaptación de estudios internacionales a la realidad nacional.
“Es un estudio muy grande, que va a abarcar personas de todo el país y de todas las edades. Son cuestionarios grandes, de unas dos horas de entrevista, pero es la mejor forma de saber cómo estamos y así tomar decisiones”, dijo Castillo.
“No son solo numeritos de conteo, es la realidad detrás de cada número”, agregó.