San José (Redacción). La falta de una ley de investigaciones médicas en seres humanos hizo que Costa Rica perdiera los recursos que le permitirían ayudar a niños que presentan crisis graves de asma debido a la insuficiencia de vitamina D.
Así lo dio a conocer esta mañana en conferencia de prensa Manuel Soto Quirós, jefe de Neumología del Hospital de Niños y coordinador de los estudios.
“Es una lástima. Teníamos todo. La aprobación de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos y de la Universidad de Pittsburgh, el dinero, las dosis de vitamina D. Ahora no vamos a poder hacerlo”, dijo Soto.
Estudios anteriores del Hospital Nacional de Niños señalaron que los menores con niveles bajos de este nutriente tienen más crisis asmáticas, más graves y las hospitalizaciones en este grupo son mayores.
El estudio, realizado con 616 asmáticos menores arrojó que el 28% de quienes tenían ataques graves y hospitalizaciones por esta enfermedad respiratoria tenían deficiencias de vitamina D.
La idea de la nueva investigación era trabajar con dos poblaciones, una de menores lactantes y otra de niños asmáticos. En los lactantes se vería si la vitamina D previene las infecciones respiratorias.
En los niños con asma los menores serían divididos en dos grupos: al primer grupo se les daría una dosis de vitamina D y al otro, un placebo.
Al cabo del tiempo se vería si quienes consumieron vitamina D realmente presentaron menos crisis que quienes no lo hicieron.
Sin embargo, esto no podrá hacerse, pues el proyecto de ley 17.777 de Investigaciones Biomédicas en Seres Humanos aún está en estudio en la Asamblea Legislativa.
Las medidas tomadas anteriormente en relación con el asma han sido beneficiosas para el país. Los especialistas señalaron esta mañana que entre el 2003 y el 2011 las hospitalizaciones por asma se redujeron en un 70%.
Esto es así porque en 2003 se dispuso que todos los médicos generales podían recetar beclometasona, un medicamento para prevenir crisis asmáticas que anteriormente solo podían manejar los especialistas en neumología.
Además, en ese mismo año, se estableció un nuevo protocolo de atención al niño asmático que prestaba mayor atención a la prevención de la crisis, y se crearon clínicas del asma en varias zonas del país.