La obesidad, la hipertensión, la diabetes y, como consecuencia, los males cardiovasculares y derrames cerebrales son la primera causa de muerte en el mundo.
Al punto de que estas enfermedades constituyen el 69% de las muertes a escala mundial . En Costa Rica la situación es aún más alarmante: como las enfermedades infecciosas no matan tanta gente debido a los controles de salud, las crónicas son la causa de muerte del 81% de los ticos.
Con esto en mente, la Organización Mundial de la Salud (OMS) presentó la semana anterior un plan para prevenir y controlar estas enfermedades.
Reglas de oro. Este plan consiste en nueve puntos que deben cumplirse antes del año 2025.
El primer punto es la reducción de la mortalidad prematura por enfermedades cardiovasculares, cáncer, diabetes o males respiratorias crónicas en un 25%.
En Costa Rica, un 23,2% de estas muertes se da en personas menores de 60 años, lo que se considera muerte prematura.
El segundo punto consiste en la reducción del uso nocivo del alcohol en al menos un 10%. En nuestro país, cada costarricense mayor de 15 años toma en promedio 5,6 litros de alcohol puro al año, cifra inferior al promedio latinoamericano.
El tercer objetivo busca reducir el sedentarismo en un 10%. En Costa Rica, la inactividad física podría enfermar y matar al 60% de los adultos nacionales.
El cuarto punto es la reducción de la ingesta de sal o sodio en un 30%. Lo ideal es consumir cinco gramos (una cucharadita) de sal por día, pero estudios dicen que los ticos hoy consumen siete gramos.
El quinto objetivo busca reducir el consumo actual de tabaco en un 30% en las personas de 15 años o más. En el país, el 14,2% de los mayores de 15 años admiten fumar.
El sexto punto pretende bajar la hipertensión en un 25%, o contención de la prevalencia de hipertensión. Esta es la enfermedad crónica más común en Costa Rica, un millón de ticos la sufren.
Como punto siete está la meta de que los casos de diabetes y obesidad no aumenten. Seis de cada 10 ticos tienen sobrepeso, y la diabetes supera el 10% de los adultos.
El punto ocho pide tener tratamientos para la mitad de los pacientes, y el nueve, buscar las tecnologías para el tratamiento.
Para la OMS, solo implementando estas medidas se detendrá el flagelo de los males crónicos.