Ellos se impusieron en las últimas votaciones del jurado al ingeniero y biofísico estadounidense Hugh Herr, Avelino Corma, Masatake Haruta y Gabor Somorjai, y la del físico John Pendry, conocido por estudios sobre invisibilidad.
Los premiados, considerados referentes mundiales de la neurología, lograron el galardón por el descubrimiento de la regeneración de neuronas en cerebros adultos, un proceso conocido como neurogénesis, y las neuronas espejo, según explicó el jurado.
Los descubrimientos de estos tres investigadores se encuentran entre los hallazgos más importantes de la neurobiología, cambiando la forma de entender el cerebro desde los tiempos del profesor español Santiago Ramón y Cajal, Nobel de Medicina en 1906.
Además, estas investigaciones abren nuevos caminos para el tratamiento de enfermedades neurodegenerativas, como el alzhéimer y el parkinson, así como para la comprensión y posible tratamiento del autismo, añadieron los miembros del jurado en el acta.
Entre sus méritos destaca la identificación de los mecanismos de nacimiento y regeneración de neuronas por parte de las llamadas células gliales, así como la migración en cadena de estas células a diferentes zonas del cerebro, lo que abre nuevas pistas sobre el origen de los tumores cerebrales.
Por su parte, Joseph Altman descubrió la neurogénesis en mamíferos adultos en los años 60 del pasado siglo, sugiriendo que las nuevas neuronas juegan un papel crucial en los procesos de la memoria y el aprendizaje, lo que apoya el concepto de plasticidad cerebral.
El tercer galardonado, Giacomo Rizzolatti descubrió las neuronas espejo, que se activan no solo durante la ejecución de una acción, sino también durante la observación de esta y que proporcionan un marco para la comprensión de los mecanismos de la empatía emocional, imitación, comunicación y comportamiento social.