Algo importantísimo de revisar es la alimentación que se da a las personas en los hospitales. En muchos países es muy común ver desnutrición entre los pacientes de hospital.
”Costa Rica participó de un estudio que coordiné en el 2003 sobre alimentación en hospitales, y era uno de los países que menos grado de desnutrición tenía: un 18,1% tenía malnutrición grave.
”Sé que la nutrición en hospitales costarricenses ha mejorado. Hemos estado comunicándonos con los centros médicos.
”Sin embargo, siempre es bueno vigilar el estado de alimentación de los pacientes hospitalizados. Muchos, sobre todo los más pobres, llegan al hospital ya con graves problemas de desnutrición”.
No existe algo así como dietas más livianas para personas con cáncer. A no ser que su enfermedad esté en el estómago o en el tracto digestivo, la alimentación debe ser la misma que la de una persona sana. Debe tener una dieta balanceada, con todos los grupos de alimentos y comer en suficiente cantidad.
”Una persona con cáncer o con cualquier otra enfermedad debe comer carnes, verduras frescas, lácteos y frutas”.
Si una persona no quiere comer, es posible que sea porque está muy deprimida. Debe explicársele la importancia de una buena alimentación una y otra vez. Una mala alimentación enferma más al paciente”.
Hay personas con mayor riesgo de desnutrición. Los ancianos, porque por su edad muchos ya no tienen dientes para comer y se les dificulta. Esta población también tiene más tendencia a la depresión y esto quita el apetito.
”Muchos ancianos también toman medicamentos que los debilitan para comer. En estos casos, lo recomendable es utilizar suplementos vitamínicos y de proteínas que les den los nutrientes que desgraciadamente no pueden comer”.
Lo ideal es que sean solo un suplemento y que la persona coma aunque sea un poco; es decir, que se complementen los nutrientes que la persona no tuvo con la comida, a través de una bebida con un suplemento nutricional.
”Si eso no puede ser así, entonces puede utilizarse un suplemento como almuerzo, por ejemplo, pero sería recomendable que la persona comiera algo para la cena. En el caso de quienes no pueden comer o comen muy poco, los suplementos sí pueden convertirse en opciones de comida.
”Sin embargo, lo importante es buscar una comida lo más completa posible. El tener cáncer –a no ser que sea en el tracto digestivo– no significa que se deba dejar de comer como se comía antes”.