Washington. AFP Las personas con un defecto cardíaco congénito común corren un riesgo mucho más elevado de sufrir un aneurisma cerebral, según un estudio estadounidense publicado en la revista Neurology .
Hasta el 2% de la población nace con una válvula aórtica bicúspide que no puede cerrarse por completo, lo cual permite que fluya la sangre entre el corazón y la aorta.
Algunas de estas personas no tuvieron nunca problemas provocados por la malformación, pero la mayoría, sobre todo adultos, sufre una pérdida de sangre de la válvula o un estrechamiento de esta.
El estudio. Los investigadores estudiaron a 61 personas con este defecto cardíaco, las cuales fueron analizadas para detectar un aneurisma cerebral.
Estudiaron también a otras 291 personas con un corazón normal, pero que durante el mismo período fueron sometidas a un escáner del cerebro, ya que sus síntomas podían indicar un posible tumor cerebral o un aneurisma, una dilatación localizada de la pared de una arteria.
Seis de las 61 personas con un defecto en su válvula aórtica también tenían un aneurisma, o 9,8% del total, comparado con 1,1% (tres) en el grupo testigo de 291 personas.
“Aunque son necesarias más investigaciones para confirmar los resultados, estos muestran un fuerte aumento del riesgo de aneurisma cerebral en las personas nacidas con una válvula aórtica bicúspide”, subrayó el doctor Wouter Schievink, director del Servicio de Neurocirugía Microvascular del centro médico Cedars-Sinai de Los Ángeles, California, Estados Unidos, y principal autor de esta investigación publicada en la revista Neurology .