París. AFP. La cronoterapia, que pretende administrar los medicamentos respetando los ritmos naturales del organismo, debe ser utilizada para luchar contra enfermedades como el cáncer porque mejora la eficacia de los tratamientos, concluyen recientes investigaciones científicas.
Los investigadores del Instituto Francés de la Salud y la Investigación Médica (Inserm) demostraron que tomar en cuenta el famoso reloj biológico, ese mecanismo en el interior de nuestro cuerpo que afecta una serie de factores como la temperatura corporal, la presión sanguínea y la tolerancia al dolor permite aumentar la eficacia de los tratamientos y disminuir su toxicidad.
La ambición de los médicos debe ser, por ello, aplicar los tratamientos en un determinado momento del día, y no en otro, dependiendo de los ritmos biológicos que rigen cada organismo, proponen estos estudios, que destacan igual la importancia de los denominados ritmos circadianos.
Estos ritmos circadianos (que viene del latín circa , que significa alrededor de y dies que significa día) modifican la acción de los medicamentos en el organismo durante las 24 horas.
A su vez, los medicamentos pueden modificar el sistema circadiano que genera estos ritmos, advierten dichas investigaciones.
Es a causa de esos relojes biológicos, que es mejor tomar una aspirina en la noche y no en la mañana, y que el organismo digiere mejor la cortisona en la mañana, en fase con el pico fisiológico de secreción del cortisol, que tiene lugar entre las seis y ocho horas de la mañana, opinan los científicos.