El alto costo del proyecto hizo que la empresa Geron frenara la primera investigación con células madre embrionarias aprobada por el Gobierno estadounidense.
Este ensayo clínico estaba en fase I (fase inicial en la que se mide la seguridad del producto) y buscaba curar lesiones en la médula espinal y así tratar la paraplejia.
En un comunicado, la empresa Geron dijo que se concentrará en buscar remedios contra el cáncer.
“Al concentrarnos en la terapia oncológica, anticipamos tener suficientes recursos financieros para el cáncer sin recurrir a capital adicional. Esto no podríamos hacerlo si mantenemos el programa de células madre”, dice el comunicado.
Repercusiones. Geron no es la única empresa que trabaja con estas células. La compañía Advanced Cell Technology tiene un ensayo con células madre para tratar una forma común de ceguera.
No obstante, el cierre del programa de Geron es visto como un retroceso en el estudio con estas células, una técnica que genera polémica pues muchas de estas células requieren la destrucción de embriones para obtenerse.
En una nota en el diario Washington Post , George Q. Daley, investigador de células madre en la Universidad de Harvard, señaló: “Mientras que las células madre están probando ser invaluables para la salud, concentrarse en otro tipo de terapia es un retroceso doloroso”.
Para Patricia Venegas, directora del Laboratorio de Citogenética del Hospital Nacional de Niños (quien trabaja con células madre adultas, no embrionarias), el esfuerzo de estudiar el cáncer podría fundamentarse en que esta es la segunda causa de muerte.
“La crisis económica en EE. UU. ha golpeado los proyectos de investigación; prácticamente se enfocan en financiar, en su mayoría, proyectos relacionados con cáncer que son fuertemente seleccionados”, comentó.