Un estudio que se extendió por casi dos décadas comprobó que los tiburones también regresan al lugar donde nacieron para dar a luz, tal como hacen otros animales como las tortugas marinas, entre ellas las Baulas, y los salmones.
La investigación se realizó en las islas Bimini de las Bahamas. Allí, un un grupo de científicos marcó cerca de 2.000 tiburones limón ( Negaprion brevirostris ) en 1995 y esperó pacientemente, durante 19 años, a ver si estas alguna vez regresaban.
Los tiburones limón se caracterizan por tener un cuerpo delgado y largo y el hocico redondeado. Los individuos miden unos 125 cm y pesan unos 10 kilos.
Habitan en las costas atlánticas de América. Se distribuye sobre todo por el Atlántico oeste: Carolina del Norte a Florida, las Bahamas, el golfo de México, Antillas, Venezuela y hasta el sur de Brasil.
Se les dice tiburones limón porque a ciertas profundidades, estos parecen tener un color amarillento debido a la interacción de la luz con el agua marina.
El reporte fue publicado en la revista Molecular Ecology e involucró profesionales del Museo Field, la Fundación Estación Biológica de Bimini, la Universidad de Miami y la Universidad de Stony Brook.
Los resultados. “Estos tiburones ‘recuerdan’ el lugar donde nacieron y tras casi una década de vagar por los océanos son capaces de regresar a la isla cuando están listas para dar a luz”, señaló Kevin Feldheim, autor principal del estudio.
Este comportamiento era sospechado por los científicos, pero hasta ahora no se tenía ningún estudio capaz de confirmarlo, principalmente por la lenta maduración sexual de estos animales.
“Cuando empezamos a etiquetar los tiburones, Bill Clinton era presidente de Estados Unidos. Cuando regresaron, ya era Obama. (...) Consideren la cantidad de tiempo que debe pasar para que maduren”, apuntó Demian Chapman, coautor del estudio.
Los 2.000 tiburones marcados en 1995 se fueron de las islas Bimini entre los 5 y 8 años y empezaron a recorrer el océano. Volvieron sin prisa.
“Debido a que son una especie de crecimiento lento y madurez sexual tardía, se necesitan estudios a largo plazo para demostrarlo (que regresan)... Estamos hablando de 10 a 15 años, lo cual dificulta la investigación por la alta inversión en costos y tiempo”, explicó Ilena Zanella, bióloga marina de la organización Misión Tiburón.
En Costa Rica. El estudio detalla que el descubrimiento es vital para la protección de sus zonas de crianza de los tiburones en escala local.
En Costa Rica, Misión Tiburón tiene claro esto y ha hecho esfuerzos por definir cuáles zonas cumplen estas características.
“A escala de país es primordial identificar áreas de crianza, en especial para las especies amenazadas y aplicar medidas para su protección, como vedas temporales o restricciones de artes de pesca, dependiendo de las especies en estudio”, explicó ´Zanella.
La primera zona de crianza identificada en el país corresponde al tiburón martillo, que se encuentra seriamente amenazado.
El año pasado definieron una de estas áreas en el golfo Dulce, que les sirve como zona de crianza antes de migrar hacia la isla del Coco.
Para los expertos, la confirmación de este regreso de los tiburones pone la bola en la cancha de países que, como Costa Rica, tienen zonas de crianza en su jurisdicción.