Con la inscripción de más de 36.000 hectáreas de área silvestre, el Parque Nacional Corcovado (Golfito y Osa) dispone de un catastro, que lo confirma como propiedad estatal.
De esta forma, Corcovado se suma al Parque Nacional Volcán Poás, en el esfuerzo del Sistema Nacional de Áreas de Conservación (Sinac) por dar seguridad catastral a los terrenos en donde están las áreas silvestres protegidas.
Para Rafael Gutiérrez, director del Sinac, la medida pretende dar seguridad jurídica a las propiedades adquiridas o que fueron donadas al Estado.
De esta manera, los planos públicos prevalecerán sobre los antiguos de índole privado. Esto evitará conflictos en el futuro.
“Ya hemos inscrito propiedades en el Poás y ahora, dichosamente, se logró catastrar el 98% de Corcovado. Aún falta una pequeña finca, pero ya el plano está debidamente inscrito. Por lo tanto, cuando se va al Registro, este ya aparece como terreno del Estado. Aunque siempre lo había sido, ya lo dejamos en firme”, comentó Gutiérrez.
Otras áreas silvestres protegidas, que se suman a este proceso de inscripción catastral, son los parques nacionales Irazú, Braulio Carrillo, Santa Rosa e Isla del Coco.
“Con Isla del Coco estamos en la etapa final. Hicimos una consulta a la Procuraduría (General de la República) porque, en este caso ,teníamos que variar un poco las coordenadas”, explicó Gutiérrez.
Límites. Costa Rica posee 169 áreas silvestres protegidas entre parques nacionales, reservas biológicas, refugios de vida silvestre y zonas protectoras. Estas son administradas por el Sistema Nacional de Áreas de Conservación.
El Décimoctavo Informe Estado de la Nación destacó en el 2012 que, tras un análisis realizado por el Programa de Regularización de Catastro y Registro (más conocido como BID-Catastro), existen inconsistencias catastrales de delimitación o sobreposición de límites en algunos parques nacionales.
En esta situación se encuentran La Cangreja, Manuel Antonio, Diriá y Juan Castro Blanco.
Este último, y por intervención de la Procuraduría General de la República, recuperó 7.737 hectáreas de bosque, al anularse una inscripción que venía desde 1978, la cual, dejaba esas tierras en manos de particulares.
BID-Catastro también señaló inconsistencias en los refugios de vida silvestre Mata Redonda, Cipanzí, playa Hermosa - punta Mala y Ostional, así como en las reservas Lomas de Barbudal, Los Santos, río Macho, cerro Nara, Tivives y Cabo Blanco.