El sueño de las mujeres enlistadas en el ejército norteamericano es servir y proteger a su país. Pero la realidad es que, una vez en el campo de batalla, nadie las puede salvar de las agresiones que sufren a manos de sus compañeros.
La guerra invisible ( The Invisible War ) es un proyecto que, según afirma la presentación de HBO en su sitio oficial, explora un secreto del que no interesa que se hable: las agresiones sexuales que sufren miles de mujeres en el ejército estadounidense.
Este lunes, como parte de la seguidilla de documentales de lujo que esa cadena transmitirá durante los siguientes lunes hasta que se acabe el año, HBO le hinca el diente al delicado tema.
Esta dramática situación se aborda a través de los desgarradores testimonios de varias mujeres militares, víctimas de violaciones dentro de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos.
Según los datos aportados por esta producción, en la actualidad una mujer soldado destinada en Afganistán tiene más posibilidades de ser violada por uno de sus compañeros que de ser abatida por fuego enemigo.
El filme, estrenado en julio del año pasado, fue galardonado por el público con el premio al Mejor Documental en el Festival de Sundance. Y es que los directores Kirby Dick y Amy Ziering exploran el ocultismo que existe sobre este asunto como nadie lo había hecho hasta ahora.
“Es un problema sistemático ya que los militares, el Pentágono y el departamento de Defensa no han afrontado, hasta ahora, esta cuestión y no han perseguido a los culpables que violan a las mujeres repetidamente, en serie. No son perseguidos de la misma forma con la que se se persigue a aquellos con los que luchan en la guerra. Y estos son realmente enemigos, con los que se debe tener cuidado” dijo Kirby Dick a la prensa en aquella ocasión.
De acuerdo con información publicada por Europa News, el mayor obstáculo al que se enfrentan las víctimas de los abusos sexuales en el Ejército es que no existe un tribunal que se ocupe de esta cuestión, solo un oficial superior, que tiene la responsabilidad de continuar con la acusación o ignorarla. Este documental sugiere que, a menudo, estas acusaciones son desatendidas.
“Si sufres una violación por un civil, al día siguiente no tienes por qué trabajar con el violador. Sin embargo, si sufres una violación en el ejército, tienes que trabajar con el violador al día siguiente. Normalmente es un compañero, un amigo o un oficial superior. Tienes que seguir trabajando con él. Psicológicamente esto resulta muy traumático” afirmó Ziering.
Tras el estreno del documental, el gobierno estadounidense planteó un cambio en la manera de denunciar las violaciones en el ejército.