A pesar de que ya cuentan con muchos años de experiencia, la noche del martes 13 de setiembre marcó un antes y un después para Tango India .
Sus fundadores Juan Diego Villegas y Felipe Solís no podían ocultar sus ansias porque todo saliera bien en el relanzamiento del grupo, que tuvo lugar en el Hard Rock Café, en Belén.
Esa noche iba a ser especial y ambos lo sabían. La presentación de su tercer disco: Dios y demonios , estuvo marcada por la buena organización de su productora Viviam Quesada, pero los músicos sentían que esa noche iban a ser examinados de principio a fin por sus críticos más duros y leales: la familia y los amigos.
Como mencionaron en varias ocasiones, este no fue un regreso porque nunca se alejaron del grupo; sin embargo, volvieron a poner toda la carne en el asador esa noche y dedicaron ensayos y producción para que todo sonara bien.
El concierto comenzó removiendo los recuerdos de una época dorada para el grupo y aunque en las filas de la banda ya no militan quienes fueran sus primeros músicos, no se sintió la diferencia porque los compañeros de Juan Diego y Felipe lograron compenetrarse con la música como si hace muchísimos años la estuvieran tocando con ellos.
En esa ocasión la banda estuvo conformada por Miguel Palacios (batería), Gabriel Wiernik (bajo), Javier Valverde (guitarra, Celia Ardiri (coros y guitarra acústica), Ricardo Alvarado (percusión), Izmael Pacheco (piano) y Ángela Ramírez y Andrea Chinchilla (en los cellos).
La sinergia fue impresionante cuando tocaron Azul y ¿Dónde estás si no es aquí? , canciones punta de lanza de la carrera de Tango India.
Este ensamble fue realizado exclusivamente para esta presentación. Empero, la idea de Villegas y Solís es poder llevar este espectáculo a varios lugares del país.
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“Siempre nos topamos fans de las canciones por todo lado porque la gente se acuerda de ellas, tienen una relación y nos cuentan en qué momentos de sus vidas los temas han sido parte de ellas; esa relación nos hace muy felices. Pero una de las motivaciones para presentar en vivo el disco es porque para nosotros es muy importante la retroalimentación con los fans desde la tarima, que la gente pueda hacer una asociación entre lo que oyó y lo que somos como artistas”, explicó Felipe antes del espectáculo.
Por su parte, Juan Diego aseguró que el concierto fue como una cuesta que les costó subir, pero cuando llegaron al final, llegó la satisfacción tanto por el deber como por el placer cumplidos.
“Cuando inició el concierto no estábamos completamente satisfechos con la parte técnica del sonido y ahí fue cuando tuvimos que sacar nuestra experiencia como banda y pasar esta cuesta para conectarnos con el público. Logramos que la gente no le pusiera tanta atención al sonido sino a las canciones; logré hacer un énfasis en los temas y así terminamos de forma positiva con muy buenos comentarios y con el disco oficialmente lanzado”, afirmó Juan Diego.
Tango India interpretó al final del concierto su más grande éxito Esperaré , con la idea de que este fuera el pitazo inicial de su “segundo tiempo”.