A principios de los años 80, la música disco empezaba a sonar cursi y pasaba de moda, mientras el mundo se dejaba seducir por un renovado rock en las propuestas de bandas como AC/DC, Def Leppard, Bon Jovi y Van Halen.
Mientras todo eso ocurría, Neil Francis Tennant y Christopher Sean Lowe se conocían, casualmente, en una tienda de artículos electrónicos. Una jugada del destino que sigue teniendo consecuencias por 30 años.
En esa misma década, una chiquilla, que se hacía llamar Madonna, escandalizaba al mundo con un vestido de novia rebelde y orgasmos simulados. También se hicieron famosos los gritos, aullidos y bailes de un talentosísimo negro que luego llegaría a ser el rey del pop.
Pero ni los revolcones de Madonna en Like a Virgen , ni los zombies de Michael Jackson en Thriller , ni las mechas de Jon Bon Jovi en Livin' On A Prayer , impidieron que Tennant y Lowe desafiaran al mundo en ese momento con una propuesta musical que quedaría inmortalizada como Pet Shop Boys.
Esta afirmación no es antojadiza, cuando se sabe que han vendido más de 100 millones de discos, colocado más de 40 de sus temas en las listas de éxitos del mundo y hoy, tres décadas después del lanzamiento de su primer disco Please , sacan un nuevo trabajo que titularon, simplemente, Super.
En el 2012, cuando estaban promocionando su producción Elysium , Tennant le dijo a El País de España: “No pensamos en retirarnos. Toda estrella pop debería continuar mientras le siga gustando lo que hace. Y eso no solo se aplica a los estrellas, sino a todas las personas”. Una filosofía que hoy sigue intacta en sus vidas y en su música.
Superstición. El número 13 y el Día de los Inocentes marcan está decimotercera producción de Neil Tennant y Chris Lowe, lanzada el pasado 1.° de abril (April Fools' Day en EE. UU.): estos chicos electrónicos, hoy con 61 y 56 años respectivamente, siguen jugando con las vueltas del destino.
El gran mérito de este dúo electropop es que, no importa la década o las influencias que han marcado su música en todos estos años, su estilo elegante, fresco y colorido sigue intacto.
Basta escuchar las primeras dos piezas de Super, Happines y The Pop Kids (que además son sus primeros sencillos), para darse cuenta de que su pop electrónico no pierde lo fastuoso y eufórico que siempre ha caracterizado sus temas.
The Pop Kids es, quizá, la canción que rememora el inicio de Pet Shop Boys, hasta convertirse en el dúo británico más famosos de todos los tiempos. La inconfundible voz de Tennant, en medio de la música creada con el teclado de Lowe, cuenta la historia de dos amigos seducidos por el ambiente discotequero y los éxitos pop de los primeros años de la década de los 90 en Londres.
Han dicho hasta la saciedad que este primer sencillo, lanzado el 16 de febrero, está basado en los años de juventud de dos de sus amigos más cercanos, pero el sabor autográfico que tiene es ineludible. Incluso, fue descrito por el crítico de música de The Boston Globe como un himno nostálgico al retrohouse .
Crítica. Desde sus primeros temas, como It's A Sin en 1987 (señalando una religión acusadora), Pet Shop Boys no solo le da vida a un estilo musical alegre y vibrante (incluso calificado de frívolo por algunos), sino que también se ha preocupado por incluir en sus producciones canciones con contenido social.
La crítica a sistemas políticos, económicos y religiosos ha estado presente en muchos de sus temas. Desde Opportunities - Let's Make Lots of Money (un ataque a las políticas económicas de Margaret Thatcher, en 1985) hasta su participación en la composición del disco Battleship Potemkin (no como Pet Shop Boys, sino como Tennant/Lowe) para recordar la película muda de 1925 The Battleship Potemkin del director ruso Sergei Eisenstein (una manera de protestar contra la invasión de Irak en el 2003), los Pet Shop Boys han señalado, con su pop contagioso, lo que consideran una injusticia, y en Super hay varios ejemplos.
En Sad Robot World , los sintetizaron enmarcan la historia de un robot triste y solo, únicamente programado para satisfacer las necesidades de otros. Una analogía que retrata la vida de muchos que viven y actúan de acuerdo a lo que se publica en redes sociales.
También destaca el tema The Dictator Decides , un cuento inspirado en la vida de los dirigentes Bashar al Asad, de Siria, y Kim Jong Un, de Corea del Norte, y cómo sus políticas represivas afectan a sus compatriotas. Desde que el tema se dio a conocer con el lanzamiento de Super, se dice que esta pieza también dibuja lo que sería un futuro gobierno del candidato republicano en los Estados Unidos, Donald Trump si llegara a ganar las elecciones presidenciales de su país.
Influencias. El hecho de mantenerse fiel a un estilo pop alternativo y electrónico por 30 años, no le ha impedido al dúo británico buscar inspiración en música y ritmos del mundo.
Ya lo lograron, con mucho éxito, en canciones como Domino Dancing (claras influencias latinas en la guitarra) y Single Bilingual (inspirada en el éxito Matador, de Los Fabulosos Cadillacs).
Aunque Super no tiene muchos experimentos con la música latina, hay una canción que se sale del montón por una tener una base reguetonera clara y sonante: Twenty-something .
Además, en este trabajo se contagiaron con algunos de los beats más populares de los años 90. El crítico de música de The Boston Globe afirma que el uso de los sintetizadores del tema Undertown asemeja mucho al utilizado en el mayor éxito de Black Box, Everybody, Everybody. Y ese es solo un ejemplo, de una propuesta musical que contiene 12 temas que evocan su pasado musical
Inteligente, pegajoso y con una estructura musical precisa y limpia, los Pet Shop Boys demostraron en sus comienzos que el pop puede ser mejor y hasta más popular que el rock . Hoy, cuando ya está superada esa estúpida lucha de géneros, los chicos populares del electropop siguen haciendo historia con Super : trascienden las barreras del tiempo logrando un sonido nostálgico y moderno que nunca pierde vigencia.