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Intenso. Los integrantes de Red Hot Chilli Peppers y Bruno Mars elevaron la temperatura en el medio tiempo. AFP (Rob Carr)
Aunque la temperatura rondaba los cero grados en el estadio MetLife, en East Rutherford (Nueva Jersey), este domingo la explosiva fusión de Red Hot Chilli Peppers y Bruno Mars le sacaron la chispa al Super Bowl.
El espectáculo del medio tiempo comenzó en medio de pirotecnia y un solo de batería interpretado por el artista estadounidense de ascendencia puertorriqueña.
Su chaqueta dorada en contraste con una camisa blanca y corbata negra, lo hicieron brillar mientras comenzaron las primeras notas de Locked Out of Heaven.
Fuera de la batería, el artista se topó con un sexteto de músicos, bailarines y coristas que lo acompañaron en la contagiosa Treasure .
Los termómetros se elevaron a lo máximo cuando los integrantes de Red Hot Chilli Peppers aparecieron en escena, y en conjunto con Mars y su elenco cantaron el conocido éxito de la banda Give It Away .
De lo máximo la fiesta pasó a un momento más conmovedor, con la proyección de saludos de soldados estadounidenses a sus familiares.
Acto seguido, Mars interpretó el tema Just The Way You Are.
El espectáculo de medio tiempo culminó con pirotecnia luces y un escueto saludo de Bruno Mars, que apenas alcanzó a decir gracias.
Encantadoras. El encuentro de la banda y el cantante no fue el único espectáculo de la jornada. Queen Latifa inauguró la jornada con America The Beautiful y la soprano estadounidense Rénee Fleming interpretó el himno de los Estados Unidos.
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Maravillosa. Fleming se ganó una ovación de dos minutos. AFP (ELSA)
“¿Alguna vez lo oyeron mejor cantado?”, dijo el presentador Joe Buck, mientras los fans dieron una ovación de dos minutos a Fleming por su interpretación del himno nacional.
El acto incluyó al Coro de las Fuerzas Armadas, imágenes de video de soldados en Afganistán, fuegos artificiales, una gigantesca bandera estadounidense y varias tomas del quarterback de los Broncos de Denver Peyton Manning ceñudo, listo para el partido.
Los hinchas vitorearon con fuerza luego de que la soprano, vestida en un traje negro de Vera Wang con una extensa banda blanca, alcanzó con facilidad la última nota alta de la canción.
Latifah, vestida formalmente en una parka azul hasta la rodilla y un cuello de tortuga blanco, fue igualmente acompañada por el Coro Juvenil de Nueva Jersey, fusionando a menudo su voz con la de los cantantes, en lugar de tratar de imponerse para asumir un papel más estelar. El efecto fue encantador.
Segura. Tras salir del campo, Fleming dijo que no se sintió nerviosa. “Hago todo lo que me da nervios con antelación para poder disfrutar una vez que salgo a escena... y funcionó bien esta vez”, expresó.
La reconocida cantante de ópera agregó: “Estoy tan contenta y honrada de haber estado ahí afuera. Amé cada segundo”.
Dijo que se aseguró de mantenerse superenfocada y agregó: “¡Cuando terminó fue tan emocionante!. Disfrutaré este partido más que cualquier otro en mi vida”.
