Joaquín Sabina da para tanto: ingenioso en eso del manejo del lenguaje a la hora de armar una canción; flaco, hombre a veces de bombín... pero también tan prolífico que todas sus composiciones no caben siempre en una sola canasta.
La obra de Sabina es tan amplia como un desierto. Lo tienen claro estos elementos de la ecuación en cuestión: Jean Marco del Castillo, Costa Rica Canta, La Banda del Traje Gris y, por ende, los Sabinazos.
Es que amparados en que ya se ha cantado demasiado lo mismo de Sabina, y que ya es tiempo de poner en el escenario lo que no siempre se monta cuando de cantar de él se trata, es que nació
El concierto, programado para mañana, justo cuando es el primer día de setiembre, en el josefino Costello’s Bar, abordará canciones que pocas veces son llevadas al escenario. No son necesariamente las más radiadas, no son necesariamente las que cualquiera reconocería. No, resulta que son las canciones que solo un seguidor de hueso colorado captaría al vuelo. Algo como una cena para paladares exquisitos.
“Claro, es un reto. Aquí hay canciones que ni yo había cantado antes, y eso ha sido un gran ejercicio que hemos preparado con todo el amor del mundo para esos seguidores especializados en Sabina”, confesó Jean Marco del Castillo a
Él, que en un repertorio de más de 20 temas tomará canciones como
“Es la primera vez que Charlie 20-27, con la alienación actual, me acompañará en un Sabinazo y, realmente, han adoptado una total entrega a este proyecto de Sabina”, dijo Del Castillo. El compromiso ha sido tal, que su banda decidió no tomar ninguna fecha, no agendada antes, para entrar de lleno al trabajo de Sabina.
“Siempre, de alguna manera, uno hace una versión personal de la canción; una versión libre pero con todo el respeto del caso. Un abordaje de acuerdo a los contextos que uno está viviendo en el escenario y de acuerdo a lo que gente está sintiendo también” aseguró Del Castillo.
Este
La elección del protagonista de este
La noche del sábado, está servida.