La campaña tiñó de colores a sus candidatas

“En el momento de entrar a la campaña, la primera observación que recibo es ‘Silvia, es que en la campaña no podés andar vestida de negro, tenés que vestirte con colores más alegres’. Realmente ha sido un proceso de acomodo”, contó la socióloga.

Esta sugerencia la llevó a los vestidores de las tiendas a enfrentarse con lo que para entonces le parecía impensable: blusas floreadas, pantalones que no fueran negros, azules o cafés, ¡y hasta el primer vestido rojo en su vida!

Luego del 2 de febrero, sabe que podría volver a sus usuales prendas oscuras, pues combinarían muy bien con la función de vicepresidenta... pero algo en ella cambió cuando se vio al espejo y encontró la parte sensible que antes no había logrado proyectar: “me tienta porque me resultaría más cómodo, pero la verdad es que le he encontrado alguna gracia a ponerme un poco de color”.

Con la insignia puesta. Para Johnny Murillo, experto en modas, la práctica de que los candidatos porten prendas con los tonos de la bandera de la agrupación está obsoleta, especialmente para las mujeres. “Esto limita poderosamente la posibilidades de demostrar su estilo personal y elegancia. Creo que una opción para mostrar su adhesión puede ser con el uso de broches”, explica.

El modisto Roberto Lobo, en cambio, otorga importancia a esta tradición y considera que, debido a la gran cantidad de partidos que hay en la arena electoral, es una de las pocas maneras de identificarse como parte de cada grupo político.

Sin embargo, reconoce que combinar accesorios, zapatos, sacos, faldas y pantalones acordes con los colores de los partidos, constituye todo un reto para las candidatas.

Entre las aspirantes a la Vicepresidencia, quien cumple a cabalidad con esta práctica es la libertaria Abril Gordienko, quien siempre aparece en actividades públicas vestida de rojo. Por eso, las prendas de este color aumentaron en su guardarropa desde que se inició la campaña.

La candidata explicó que no se trata de un lineamiento de relaciones públicas establecido por el Movimiento Libertario. “Lo hago genuinamente, por pura convicción. Mi imagen la manejo yo solita”.

Ana Helena Chacón, del Partido Acción Ciudadana (PAC), también muestra interés en llevar el rojo y el amarillo, propios de su bandera.

“Quiero que la gente me identifique como una persona PAC”, dice. Por eso, en las giras, porta una camiseta que trae estampado “La Vice”, diseñada por su hija Marisa Batalla.

Para las aspirantes del Frente Amplio y del Partido Unidad Social Cristiana, Dagmar Facio y Patricia Vega, el asunto reviste poca importancia.