El actor de 64 años Gerard Depardieu, quien se opone firmemente a un proyecto del gobierno de su país, Francia, de aumentar los impuestos a los ricos, recibió ayer la ciudadanía rusa.
Un breve anuncio en la página oficial del Kremlin indicó que el presidente ruso Vladimir Putin firmó ayer la concesión de la ciudadanía al afamado actor francés.
Depardieu está muy molesto por la intención del presidente galo Francois Hollande de elevar a 75 por ciento los impuestos a los acaudalados. Rusia tiene un gravamen parejo de 13 por ciento. Un representante del actor se abstuvo de hacer declaraciones en torno al asunto.
Depardieu, quien ha actuado en más de 150 películas, publicó en diciembre una carta abierta en la que dijo que devolvería su pasaporte y su tarjeta del seguro social de Francia.
Hollande quiere gravar con 75 por ciento los ingresos de los súper ricos para reducir la deuda y el déficit. En consecuencia, la decisión reciente de Depardieu de mudarse a Bélgica para beneficiarse de los impuestos bajos fue repudiada por el gobierno galo.
“Soy un verdadero europeo, un ciudadano del mundo”, afirmó Depardieu en la carta. El tribunal supremo de Francia rechazó el pasado 29 de diciembre el nuevo impuesto a los millonarios, pero el gobierno respondió que modificará ligeramente la propuesta para volver a presentarla.
Lazos con Rusia.
El actor es bien conocido en Rusia, donde aparece en un mensaje comercial de una tarjeta de crédito de Sovietsky Bank y tiene una presencia prominente en el sitio web del banco. En octubre, Depardieu participó en las celebraciones oficiales en Grozny, capital de Chechenia, durante las cuales gritó: “Gloria a Chechenia, gloria a Kadyrov”, situado junto al propio Ramzan Kadyrov, número uno de esta república, acusado de abusos por las ONG de defensa de los derechos humanos.